El Ballet Nacional Ruso presenta El Lago de los Cisnes en el Fernán Gómez el próximo jueves 20 de octubre. El Ballet Nacional Ruso es en la actualidad una gran institución, con más de 50 bailarines con amplia experiencia.
El próximo jueves 20 de octubre, a las 11 horas, el director del Ballet Nacional Ruso, Sergei Radchenko, presentará El lago de los cisnes, que estará en el Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa durante seis únicos días.
El Russian National Ballet regresa a la Sala Guirau donde el pasado año agotó las localidades con su Gran Gala Tchaikovsky, un montaje en memoria de la que fuera su pareja de baile durante casi 20 años, la gran bailarina Maya Plisétskaya, donde el público pudo disfrutar de pasajes de los más importantes ballets de Tchaikovsky, tales como ‘El Lago de los Cisnes’, ‘La Bella Durmiente’, ‘El Cascanueces’ o ‘Romeo y Julieta’
El ballet se fundó en 1989, cuando el legendario solista del Teatro Bolshoi de Moscú, Sergei Radchenko, intenta realizar su visión de una compañía que reuniera a los elementos más clásicos de las grandes compañías de Ballet Kirov y Bolshoi en una nueva compañía de ballet independiente dentro del marco del ballet clásico ruso.
El Ballet Nacional Ruso
El Ballet Nacional Ruso es en la actualidad una gran institución, con más de 50 bailarines con amplia experiencia, muchos de los cuales han estado con la compañía desde sus inicios. Ha realizado giras por Rusia, México, Bolivia, Argentina, Japón, Reino Unido, Estados Unidos, Turquía y Sudáfrica.
Bajo la atenta dirección de Sergei y Elena Radchenko, ha realizado un continuo trabajo de nuevas producciones en su repertorio, destacando los montajes del repertorio del siglo XX, ‘Cinderella’, ‘Legend of Love’, ‘Stone Flower and The Golden Age’. S. Radchenko ha repuesto también las coreografías originales de Marius Petipa, incluyendo nuevas producciones como ‘Don Quijote y Paquita’ y la recreación del cuento de Pierrot y Coralli, ‘Giselle’.
«Ser una compañía independiente nos permite sobrevivir desde el 89 porque somos los responsables de todo y nos hacemos cargo de los sueldos, del vestuario o de los alojamientos. Cuando dependes de un dinero estatal te pueden dictar el repertorio y nosotros somos libres de hacer lo que queramos», explicaba Serguei Radchenko, quien defendió el ballet clásico, «que perdura desde el siglo XIX», frente a la danza contemporánea.
