La Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en España expone que la pobreza infantil, es decir, la que afecta a niños y niñas menores de 16 años, ha experimentado un aumento sustancial durante el pasado año 2016, alcanzando un 30,1%. Actualmente, dicha cifra sitúa a nuestro país con la segunda tasa más alta de la Unión Europea, sólo detrás de Rumanía. Esto significa que uno de cada tres jóvenes está en riesgo de exclusión social, o sea, sin recursos con los que pagar las necesidades básicas, según información de la Oficina Europea de Estadística, Eurostat.
En 2013, surgió la plataforma contra la exclusión social infantil Música por la Paz, que día a día lucha para erradicar esta lacra social que se está extendiendo e intensificando en una parte significativa del mundo industrializado. De hecho, se estipula que en el año 2030, 16 millones de niños vivirán en la extrema pobreza. Y el desfavorable contexto que genera esta situación está provocando que se incremente la tasa de abandono escolar. Cabe destacar que un 40% de los hijos de familias pobres deja sus estudios antes de acabarlos. Además se calcula que en 2030, 60 millones de niños en edad de asistir a un colegio para cursar Educación Primaria seguirán sin escolarizar.
Música por la Paz se encuentra en lucha por una sociedad que trate de igual manera a sus miembros más vulnerables. Esta organización tiene como objetivo que todos los niños y niñas tengan los mismos derechos a gozar de educación, de una vida saludable y de una infancia segura y protegida. La finalidad principal es que la suma de todo ello proporcione a los pequeños oportunidades básicas, que se traducirán en una vida adulta y productiva.
Esta asociación cuenta con multitud de voluntarios que se reparten entre los 16 centros que existen en casi todo el territorio nacional. Muchas familias deciden acudir a estos centros por no poder conciliar la vida laboral con sus deberes familiares. Algunas de éstas no tienen compatibilidad de horarios con el trabajo y por ello dejan a sus hijos en dichos centros. Allí, los niños reciben apoyo escolar para hacer los deberes y estudiar y, además, disfrutan de diferentes actividades que se programan para que aprendan más y se diviertan. Asimismo, se organizan excursiones para fomentar la relación entre unos y otros. También se constituyen talleres para avivar el trabajo en equipo y promover en los niños valores imprescindibles como la tolerancia, el respecto, el cuidado del medio ambiente y muchos otros. Como parte de las necesidades alimenticias de los niños y niñas asistentes a los centros, a todos y cada uno de ellos se les entrega la merienda.
Para colaborar con la asociación, los interesados pueden hacerse socios, dando una aportación mensual de la cantidad que se desee. Para ello, se debe seleccionar el coste preferido y rellenar un pequeño formulario con nombre, apellidos, teléfono, número de documento de identidad, correo electrónico y número de cuenta para asociar a la inscripción. Asimismo, se pueden hacer donaciones a través de su página web con el importe que cada uno pueda o quiera.
