¿Te gusta el olor de los libros viejos? eso es gracias a la Lignina

La lignina es un polímero que, junto con los compuestos químicos utilizados para los libros, origina el olor a libro antiguo. Además, se le conoce como «el primo hermano» de la vainilla, por eso a muchos nos gusta tanto.

libros viejos

Muchos de los que seguimos leyendo en formato papel seguimos disfrutando del olor de los libros, ya sea uno nuevo o uno al que le pesen los años. De hecho, todo el mundo conoce ese olor característico que se desprende cuando abrimos un libro nuevo, a pesar de que cada día cueste más, tanto comprar un libro como sumergirnos en él.

Y no solo el olor a nuevo. Cuando nos hemos adentrado en un libro antiguo, hemos notado ese olor que a muchos -me incluyo- nos gusta. Un olor que si nos tapasen los ojos y nos lo pusiesen delante sabríamos que es a libro viejo.

Pero, ¿por qué nos gusta tanto?

Este aroma se debe a que los compuestos químicos utilizados para los libros (el pegamento, el papel, la tinta) comienzan a descomponerse. Es en concreto el papel, que contiene lignina, el que da ese olor tan característico. La lignina es el polímero más abundante en el mundo vegetal y por eso está presente en el papel. Gracias a la lignina los troncos de los árboles se mantienen firmes y erguidos y pueden alcanzar las elevadas alturas que alcanzan. Cuando la lignina se oxida,vuelve amarillento el papel, pero también desprende más olor.

libros viejos

Además, el olor de la lignina es parecido al de la vainilla -”el primo hermano” de la vainilla como dicen algunos- y, por eso, nuestro cerebro lo asocia a un buen olor y hace que nos guste.

Patrimonio de los olores

A pesar de que nos guste este aroma, es un buen indicador del estado de deterioro del papel. Por ello, se han buscado varias estrategias para detectarlo de manera temprana y poder ralentizar el proceso de descomposición. Una de las opciones es la de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, que trata 250.000 libros al año con óxido de magnesio, capaz de disminuir la acidez del papel.

Además, la investigadora química Lorraine Gibson, de la Universidad de Strathclyde en Escocia, es la responsable del proyecto Patrimonio de olores. Para este estudio, ha desarrollado un dispositivo que actúa como una “nariz química”, capaz de rastrear los niveles de lignina cercanos a un libro y poder hacer saltar la alarma antes incluso de poder notarlo nosotros con nuestro olfato.

Este olor es tan peculiar y gusta tanto que se han llegado a lanzar perfumes con extractos de lignina y así imitar el olor de libro antiguo. Sin embargo, con la llegada de la tecnología y de los eBooks, no sabremos qué pasará en un futuro con este aroma. Esperemos que, los pocos libros que se compran a día de hoy, se guarden como tesoros.

Angel Sánchez Carbonell
Angel Sánchez Carbonell
Ángel Sánchez Carbonell - Director de Crónica Norte. Desde hace 34 años dedicado profesionalmente a la información y entretenimiento (TVE, Onda Cero, Tele Cinco, COPE...) Pero ante todo: un enamorado de la geografía de la península Ibérica. Montañero y aficionado a la gastronomía y la enología. Cuando la vida me lo permite señalizo caminos naturales como Técnico de Senderos de la Escuela Española de Alta Montaña. (EEAM) Pero sobre todo me pierdo por ellos...

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

spot_img
spot_img
spot_img
40,069FansMe gusta
7,865SeguidoresSeguir
40,069SuscriptoresSuscribirte

Puede Interesarle...

pronto descubrirás aquí algo nuevo...!!!