Hoy, miércoles 30 de septiembre, Sanse celebra su última noche de conciertos en las Fiestas Patronales de este año. Para el cierre, Zascanduri, Curro García y Rubén Pozo se suben a los escenarios del Parque de la Marina y de la Plaza de la Constitución a partir de las 21:00 horas.
La primera actuación será la de Zascanduri, a las 21:00 horas en el Anfiteatro. Las hermanas “Zas” “Can” y “Duri” han venido a tierra firme para recordarnos que todos los seres del reino vegetal, son nuestros amigos, y a los amigos se les debe tratar con cariño. El espectáculo de Zascanduro contiene todos los ingredientes del éxito: música original y tremendamente pegadiza con toques de música folk, historia teatralizada, cuentos, bailes y coreografías, así como un mensaje positivo y ecológico. Un musical que invita a recuperar nuestra magia interior, y nos recuerda que todos somos duendes al nacer.
Por su parte, Curro García y Rubén Pozo (ex-pereza) se subirán al escenario de la Plaza de la Constitución a las 22:00 horas para deleitarnos con el mejor pop-rock.
En Marcha es el segundo trabajo de Rubén Pozo. Conocido por ser el una de las mitades de Pereza, Rubén comenzó su carrera musical estando aún en el instituto, donde formó, como guitarrista y compositor, Buenas Noches Rose, una banda con predilección por el rock añejo de riff y melena y con el que publicó tres discos. En 1999, junto a José Miguel Conejo Torres, Leiva, y el batería Tuli, el grupo Pereza, con el que publicó su primer disco en 2001. Convertidos en dúo, Pereza comenzó su despegue definitivo con discos como Algo para cantar, Animales, Los amigos de los animales, Aproximaciones y Aviones, último disco de la formación antes de que ésta decidiera tomarse un descanso. En 2012, Rubén Pozo debutó en solitario con Lo que más.
Curro García comienza con 11 años, amarrado a una guitarra y enganchado a las letras de “The Beatles”, a dar sus primeros pasos en la música. En 2007, junto con varios compañeros del instituto forma el grupo “Carbono 14”, grupo que el artista define como su «escuela musical», pero hace un año la banda se separó y Curro continuó su camino en solitario, una nueva etapa que afronta con mucha ilusión y ganas de comerse el mundo.
