El yoga mejora la salud de quienes lo practican, gracias a sus múltiples beneficios. Las posturas de yoga no dejan de sorprender por los beneficios físicos, mentales y espirituales que se consiguen. Su práctica garantiza un cuerpo firme, una mente estable y un espíritu benevolente.
El Yoga (palabra que proviene del Sánscrito y significa ´unión´) es la práctica de procedencia india más extendida a lo largo del mundo. Sus beneficios, tanto físicos como espirituales, han sido más que estudiados y ha quedado patente su poder para reducir el estrés mental y para tonificar la musculatura corporal.
Un estudio realizado por el Centro Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa de EE. UU. asegura que el yoga mejora la calidad de vida, reduce el estrés, la ansiedad, el insomnio, la depresión y el dolor de espalda. También se ha descubierto que reduce la frecuencia cardiaca y la presión arterial. Y, quizá de forma nada sorprendente, se ha descubierto que el yoga mejora la condición física, la fuerza y la flexibilidad, según el centro de medicina alternativa.
Tipos de beneficios del Yoga:
- Físicos: fortaleza, resistencia, flexibilidad, postura, energía, salud, mejora de la circulación sanguínea.
- Mentales: Concentración, estabilidad emocional, memoria, atención, tranquilidad, autoreconocimiento, fortalecer el autoestima.
- Espirituales: Sabiduría, libertad, integración, descanso, calma
Beneficios en los niños
El yoga es una actividad recomendada para todos los niños y niñas. La búsqueda del equilibrio y la armonía constituye una buena base para que, en el futuro, los pequeños disfruten de una vida adulta alegre y saludable.
Tanto para el niño inquieto o activo como para el tímido o vergonzoso, el yoga ayuda a canalizar su energía y reafirmar su autoestima. Ayudará a los más activos a aprender a relajarse y concentrarse más, mientras que también fomentará que los niños más callados pierdan su miedo ante los demás y se abran al universo que les rodea.