Viajar con niños no es sencillo. Cuando el trayecto es largo, es muy común escuchar las dos clásicas frases: ‘me aburro’ o ‘¿cuánto falta?’. Y es que, un viaje largo en un espacio reducido es todo un reto para nuestros hijos. Sin embargo, para que el trayecto sea lo más agradable posible hay dos claves: la diversión y la comodidad.
Una de las cosas que tenemos que tener en mente a la hora de hacer un viaje largo con niños es intentar hacerles el trayecto lo más corto posible. Por ello, a la hora de preparar nuestro viaje no puede faltar una lista de canciones que los peques puedan cantar y distraerse un rato.
Para afrontar el aburrimiento, qué mejor aliado que reproductor de DVD portátil es una fantástica posibilidad para que los niños disfruten de sus películas y series favoritas durante el trayecto, ya que es fácil y cómodo de transportar. Un reproductor portátil hará que las horas se pasen volando.
La comodidad es un factor clave
La comodidad es clave para que el trayecto sea menos duro. Una almohadilla o reposacabezas les permitirá estar en una postura adecuada, sobre todo en el momento en el que se duerman. La funda para la silla es una gran opción para mantener la silla limpia, tanto si el niño no aguanta hasta llegar al baño, como para que quede libre de migas o trozos de galletas. Para ayudar a aliviar rozaduras, también podemos utilizar una funda para el cinturón de seguridad.
Para proteger la tapicería y cuidar el interior del coche podemos colocar una esterilla que cubrirá de arriba a abajo toda la parte dorsal de los asientos delanteros para proteger de las marcas que pueden dejar los niños al apoyar los pies. No sólo evita las marcas de patadas sino que sirve de organizador con fácil acceso a los juguetes favoritos de nuestros hijos. De esta manera, con comodidad, seguridad y entretenimiento; será más fácil para los niños hacer un viaje de varias horas.
