El prepago vuelve a utilizarse. Y es que, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), se está ampliando la oferta y ahora las tarifas de prepago son las más baratas del mercado, siempre que no se hable y se navegue en exceso.
Fácil en el control del gasto: recargar antes de usar.
«Para llamar necesitabas tener saldo en la tarjeta. En el 2007 esto era algo normal, pero ocho años después en España hay 6 millones menos de líneas móviles con prepago; y 10 millones más de líneas de contrato», según explica la organización.
El prepago fue retirándose y quedó solo para que los padres controlasen el gasto de sus hijos adolescentes o para líneas con un consumo muy bajo. Pero, actualmente, está comenzando a emerger otra vez esta tendencia gracias a tarifas muy agresivas.
Ventajas del prepago
- Barato para consumos medios y bajos: como el cliente paga por adelantado, el operador no corre riesgos y puede atreverse con precios más bajos que en líneas de contrato.
- Recarga automática: ya no hace falta ir hasta el banco, tienda o supermercado para recargar el móvil. Ahora todas las compañías (excepto Jazzcard) permiten vincular la cuenta o tarjeta y automatizar la recarga.
- Tarifas especializadas: por ejemplo, las tarifas con llamadas internacionales, que ahora incluyen bonos de voz y de Internet, han conseguido abarcar un espectro mucho más amplio de usuarios.
Desventajas
- Menos servicios: es importante revisar a fondo las condiciones que ofrecen, especialmente en una compañía pequeña. Por ejemplo: Jazzcard no tiene roaming, lo que supone quedarse sin móvil si se viaja al extranjero, y Lyca Mobile no ofrece tethering.
- Cambio de tarifas constantemente: por lo que se debe estar atento a los avisos que mandan por SMS.
- La tarjeta prepago caduca: y cuando eso pasa, el dinero que había dentro desaparece. Cada compañía tiene sus reglas, como exigir que se haga al menos una recarga cada 6 meses, que cada 2 meses se realicen un número mínimo de llamadas, etc.
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