Slow Food, Greenpeace y otras organizaciones se han unido y han enviado una carta a la Unión Europea para que imponga una serie de medida que prohíban o restrinjan el cultivo de alimentos transgénicos.
Y es que el 11 de noviembre es cuando la Comisión se reúne para votar si finalmente los países miembros puedan restringir o prohibir el cultivo de estos alimentos modificados genéticamente.
Diariodegastronomia.com recoge la carta en la que demandan entre otras cosas la concesión del derecho a los estados miembros de restringir el cultivo de estos productos, o también exigir a los estados miembros la adopción de medidas de coexistencia para evitar la presencia accidentalmente de estos productos en otros.
Otra de las medidas que demandan es permitir la toma de decisiones individuales sobre la base de consideraciones nacionales y locales o la reintroducción de los impactos ambientales como argumento a utilizar por los estados miembros para justificar prohibiciones nacionales.
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