La Comunidad de Madrid ha dado el primer paso para aprobar su Ley de Administración Digital e Inteligencia Artificial, una normativa que busca transformar la relación de los ciudadanos con los servicios públicos. Esta iniciativa garantiza un uso ético y seguro de la tecnología y promueve la accesibilidad total a través de canales digitales. El objetivo final es simplificar trámites, reducir la burocracia y mejorar la calidad de vida de los vecinos.
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha autorizado la publicación de la consulta pública del anteproyecto de la Ley de Administración Digital e Inteligencia Artificial en el Portal de Transparencia, lo que supone el paso inicial en su tramitación antes de la redacción definitiva de la norma. El texto se presenta como una medida pionera con la intención de regular los servicios públicos digitales y la relación de estos con el ciudadano a través de medios y canales electrónicos.
El propósito principal de esta futura ley es establecer la obligación de contar con servicios públicos totalmente digitales y accesibles para todos los madrileños. Esto incluye la regulación de herramientas esenciales en la interacción electrónica, como los sistemas de identificación y firma electrónica, los registros administrativos o el archivo electrónico único. La normativa también persigue adaptar la región al nuevo reglamento europeo en la materia, consolidando a Madrid como un entorno confiable, innovador y competitivo para el despliegue de tecnologías de vanguardia.
La Cuenta Digital como canal central de comunicación
Una de las novedades más destacadas que recoge el anteproyecto es la introducción de la Cuenta Digital como el canal central de comunicación entre la Administración y los ciudadanos. Esta plataforma, que ya permite a los madrileños acceder a más de ciento setenta servicios desde cualquier dispositivo, se consolida como la vía principal para la relación electrónica.
La ley no solo se enfoca en la digitalización de trámites, sino que también establecerá el uso de la IA en el ámbito de la Administración autonómica. El texto recogerá las garantías de los ciudadanos cuando los servicios públicos de la región incorporen esta tecnología. Además, busca fomentar el desarrollo responsable y ético de esta herramienta, la competitividad del tejido empresarial y favorecer la colaboración entre el sector público-privado y el científico.
Apuesta por la IA en sectores estratégicos
La futura Ley se integrará en la Estrategia de Digitalización para los años dos mil veintitrés a dos mil veintiséis y servirá como un marco de desarrollo para impulsar la innovación y el crecimiento económico en la región. Se realizará una apuesta decidida por la implementación de soluciones de Inteligencia Artificial en áreas consideradas estratégicas. Estos sectores incluyen la salud, la educación o la movilidad.
La normativa también busca apoyar a las pequeñas y medianas empresas (pymes) en su camino hacia la digitalización. Para el sector público, se establecerán los principios generales para el uso de la IA, junto con mecanismos de control y seguimiento y los procedimientos administrativos para su puesta en marcha. Se incorporarán medidas para asegurar la transparencia de los algoritmos, la protección de los datos personales y la supervisión ética de los sistemas automatizados.
Mayor agilidad y reducción de la burocracia
La implementación de la Ley permitirá agilizar y simplificar numerosos procedimientos administrativos. Se espera que trámites comunes, como la tramitación de subvenciones, contratos y formularios, sean más rápidos y sencillos para los vecinos. La Inteligencia Artificial jugará un papel crucial al hacer posible la automatización de tareas.
Esta tecnología facilitará el pre-rellenado de datos, la detección de errores o la generación automática de borradores para que el ciudadano solo tenga que revisarlos. Esto no solo liberará tiempo a los empleados públicos, sino que también se espera una mejora en la atención ofrecida a los madrileños. Adicionalmente, la IA posibilitará la oferta de servicios personalizados según el perfil y las necesidades de cada usuario, permitiendo gestionar trámites en apenas cinco minutos. La reducción de la carga burocrática se sentirá también entre profesionales de la salud, docentes y equipos técnicos. Mediante modelos de análisis predictivos, se podrá anticipar la demanda de servicios sanitarios, educativos o de transporte, optimizar la asignación de recursos y evaluar en tiempo real el impacto de las políticas públicas.
Garantías de seguridad y formación digital
Es importante destacar que, para garantizar la calidad y seguridad, todos los sistemas serán validados y certificados antes de su puesta en marcha, especialmente en ámbitos tan sensibles como la sanidad, la atención y la justicia.
Además de la implementación tecnológica, la Comunidad de Madrid busca reducir la brecha tecnológica entre la población. Para ello, se promoverán iniciativas de formación y capacitación digital dirigidas a empleados públicos, estudiantes y profesionales. El Gobierno regional también desarrollará programas de formación en IA para personas desempleadas y fomentará la adaptación del talento a los nuevos perfiles profesionales del sector tecnológico.
El anteproyecto también adaptará los derechos de propiedad intelectual e industrial, así como la confidencialidad y el secreto empresarial, de acuerdo con la legislación aplicable. La Comunidad de Madrid brindará apoyo a las entidades locales (ayuntamientos) para que puedan desarrollar e implantar sus propios sistemas de Inteligencia Artificial, ofreciendo soluciones adaptadas a sus necesidades específicas.
Casos reales de uso en la Administración
La Consejería de Digitalización ya ha identificado más de doscientos proyectos potenciales de Inteligencia Artificial y tiene casi cien en funcionamiento. Actualmente, la Administración madrileña cuenta con ochenta y ocho casos de uso de IA ya desarrollados, con un noventa por ciento aplicados en el ámbito sanitario.
En Sanidad, se ha lanzado la plataforma SERMAS GPT, que asiste a los profesionales médicos en la detección precoz de enfermedades raras. Este año se integrará la IA para el diagnóstico temprano de cáncer de próstata a través de resonancia magnética. Inicialmente se hará en el Hospital público Ramón y Cajal, y se extenderá a otros catorce centros de la red sanitaria. También se aplicará para agilizar el tratamiento del dolor crónico no oncológico.
En el ámbito de la Justicia, el uso de la IA ha conseguido reducir los tiempos en los trámites judiciales en un veinte por ciento. Un ejemplo de esto es el Buscador 360º que facilita a jueces, magistrados y letrados la consulta rápida entre sesenta millones de documentos digitalizados y más de quinientos mil videos transcritos. En Asuntos Sociales, existe un proyecto pionero que utiliza la robótica social asistencial y la Inteligencia Artificial combinadas para mejorar la atención temprana de niños con discapacidad.
Incluso en el ámbito económico, se está desarrollando un proyecto de IA generativa para diseñar planes de empleo juvenil personalizados. Este sistema permitirá a los trabajadores de las oficinas públicas prestar una atención encaminada a reducir el desempleo a través de la orientación y la formación.
