El 74% de la población madrileña mayor de 15 años considera que su salud es buena o muy buena y, en concreto, el 15% de los madrileños declara que su salud es muy buena, y el 59,9% piensa que es buena. Estos datos se desprenden de la última encuesta sobre salud realizada por la Comunidad de Madrid, y que recoge las entrevistas a 12.000 madrileños mayores de 16 años (en 2007) y representativos del conjunto de la población, tanto en lo relativo a situación socioeconómica, lugar de residencia o nacionalidad.
Se trata de la mayor encuesta realizada sobre la salud de la población, y contempla asuntos innovadores sobre los condicionantes de la salud como la influencia de los factores medioambientales (el ruido o la contaminación atmosférica) o bien el trabajo dentro y fuera de casa.
Según la encuesta regional, el problema de salud crónico más prevalente en la población mayor de 16 años es la hipertensión (13,9%), seguido por las artrosis, artritis y reumatismos (13,8%), las ciáticas, lumbagos y dolores de espalda (12,8%).
En menores de 35 años: la alergia (17%), los dolores de espalda (5,2%), las jaquecas y migrañas (3,9%) y el asma son los trastornos más frecuentes. Superados los 65 años las dolencias más habituales son la hipertensión arterial (43%), la artrosis (42,8%), el colesterol elevado (26,2%), los dolores de espalda (19,4%) y la diabetes (16%).
Acudir al médico
El 88% de los madrileños mayores de 16 años acude al menos una vez año a su médico de familia o consulta de Enfermería de Atención Primaria, tanto en el sistema público como en el privado. El 20% de las personas de más de 15 años han utilizado los servicios de urgencias, públicos y privados en los últimos 12 meses. Las mujeres acuden más a las urgencias y se aumenta en número de visitas en personas de edad avanzada.
Un 41% de los madrileños ha consultado al dentista en el último año previo a la encuesta, con una mayor presencia de mujeres y una disminución de las vistas a partir de los 65 años. El 11,1% de la población madrileña mayor de 15 años afirma tener alguna limitación grave permanente, con una mayor prevalencia entre las mujeres; se trata de una afirmación que aumenta con la edad y es mayor en los trabajadores manuales y de origen español. Por lo que se refiere al cuidado de los demás, un 5,6% de la población general, y hasta el 7% de las mujeres, declara ser cuidador principal, sólo o con ayuda en el propio domicilio de una persona discapacitada o mayor de 74 años que lo necesita.