Científicos de la Universidad de San Diego han desarrollado un nuevo chip que transmite señales más fuertes para restaurar el movimiento en las personas con la médula espinal dañada.
Cuando se produce una lesión en la médula espinal se interrumpe, en parte, el circuito por el que transcurren las señales neuronales. El cerebro aún manda impulsos y las extremidades aún las reciben, pero la señal se pierde en la médula espinal dañada.
Este nuevo chip va a registrar esas señales eléctricas del cerebro y transmitirlas a los receptores del miembro sin pasar por la médula espinal dañada, y así, poder restaurar el movimiento. Se trata de una mejora muy importante que puede ser duradera y transmitir señales más claras y fuertes.
La tecnología, conocida como una interfaz cerebro-ordenador, graba y transmite señales a través de los electrodos, que son pequeñas piezas de material que leen las señales de productos químicos del cerebro conocidas como neurotransmisores. Mediante el registro de las señales del cerebro en el momento en que una persona tiene la intención de hacer algún movimiento, la interfaz aprende el patrón de señal eléctrica correspondiente y puede transmitir ese patrón a los nervios de la extremidad, o incluso a una prótesis, la restauración de la función de la movilidad y el motor.
El material que se usa actualmente para estos casos es el platino, el problema que tiene este material es que se acaba deteriorando con el paso del tiempo, llegando incluso a fracturarse o desintegrarse. Los científicos de la Universidad de San Diego han desarrollado electrodos con carbón vítreo, una forma de carbono. Este material es aproximadamente, 10 veces más suave que el platino, lo que significa que corroe menos y dura mucho más tiempo. Este material además transmite el doble de señal, con lo que es mucho más calra y fácil de interpretar.
Los investigadores en el laboratorio de Kassegne están utilizando estas nuevas y mejoradas interfaces cerebro-ordenador para registrar señales neurales tanto a lo largo de la superficie cortical del cerebro como las que se producen desde el interior del cerebro.