Desde que el genio inglés estrenó Ricardo III, la presencia de su obra ha sido una constante en los escenarios de todo el mundo. El Teatro Adolfo Marsillach de San Sebastián de los Reyes ha programado el estreno absoluto de la adaptación que han realizado Miguel del Arco y Antonio Rojano a nuestros tiempos de este clásico de Shakespeare. Una versión libre dirigida por Del Arco que potencia algo muy presente en el original: la comedia.
Esta es una obra plagada de envidias, de corrupción de uno y otro color, luchas de poder, codicia, injusticia, fake news, engaños políticos, intereses partidistas… “Bueno, lo que viene siendo un día normal en la vida pública española del siglo XXI”, dicen los responsables de los textos, Miguel del Arco y Antonio Rojano, y a los que dan vida los actores Álvaro Báguena, Chema del Barco, Israel Elejalde, Alejandro Jato, Verónica Ronda, Cristóbal Suárez y Manuela Velasco.
La trama argumental se sitúa en el reinado del rey Eduardo IV de Inglaterra, quien mantiene en orden y la paz en el reino, pero su hermano Ricardo ansia el trono para sí. Jorobado y deformado, el protagonista revela la ambición y la envida que le corroe las entrañas. Para alcanzar la corona, primero conjura contra Jorge de Clarence, su hermano que le precede en el trono. Más tarde consigue esposarse con Lady Ana Neville y se granjea la confianza de los nobles presentándose como un hombre piadoso. Tras la muerte de Eduardo IV es declarado monarca bajo el nombre de Ricardo III, iniciando un periodo de terror y muerte que le conducirán a la locura, la desesperación y la derrota final.