Uno de cada 10 españoles sufre depresión. El presidente de la Asociación Española de Psicología Conductual, Gualberto Buela, ha precisado que un 10% de la población española sufre depresión, «aunque hay personas que la tienen y no están diagnosticadas, pero que pese a esta cifra somos los que menos depresión tenemos», en relación con el resto de países de la Unión Europea.
Así, ha concretado que las tasas más altas de depresión se da en los países nórdicos y que las estadísticas «demuestran que los problemas de depresión, estrés y ansiedad aumentan cada década». «Esto tiene que ver mucho con el estilo de vida, cuando se es más exigente se incrementan los trastornos», ha comentado, al tiempo que ha incidido en que «los instrumentos de diagnóstico cada vez son más finos».
En este sentido, ha apuntado que en Estados Unidos «se manejan datos de un 25% de personas con trastornos» del sueño, mientras que en China el dato es de «sólo un 4%». Buela ha relacionado estos datos con el modo de vida de ambos países, pero a continuación ha matizado que «probablemente también influya la manera de evaluar, porque en China no existen instrumentos tan precisos».
Un 1% del PIB se dedica a gastos relaciones con la depresión
En cuanto a las repercusiones económicas que tienen los trastornos del sueño, la depresión, el bruxismo (rechinar de dientes) o la narcolepsia(excesiva somnolencia), ha precisado que «un uno por ciento del PIB europeo se dedica a los gastos relacionados con la depresión». A este respecto, ha comentado que «es lógico entender que el gasto es enorme» si en España el dato de afectados por depresión es de un 10% y es el mínimo a nivel comunitario.