En su informe anual Amnistía Internacional (AI) ha señalado que el uso excesivo de la fuerza policial contra el movimiento 15-M durante las manifestaciones del año pasado.
(Foto: Olmo Clavo)
El informe indica que “la policía golpeó con sus porras a manifestantes pacíficos y disparó proyectiles de goma” a los manifestantes indignados en el transcurso de las acampadas y manifestaciones que se sucedieron entre mayo y agosto de 2011 “para exigir cambios en el sistema político y económico y en las políticas sociales sobre empleo, educación y salud».
En concreto el informe de AI recoge el uso de la fuerza de la Policía durante la manifestación en Barcelona el 27 de mayo del 2011 y también menciona el caso de dos mujeres que denunciaron haber sido golpeadas por la Policía en Madrid cuando participaron en una manifestación en agosto pasado.
Controles indiscriminados a inmigrantes
‘El excesivo uso de la fuerza policial contra el 15-M’ no es el único aspecto que señala el informe de AI, que también señala que «España siguió desoyendo las peticiones para que ponga fin a la detención en régimen de incomunicación de los sospechosos de terrorismo y continuaron produciéndose controles discriminatorios de identidad, centrados específicamente en personas pertenecientes a minorías étnicas«.
AI sostiene que en 2011 «continuaban efectuándose controles discriminatorios de identidad, centrados específicamente en personas pertenecientes a minorías étnicas, y se emprendían acciones judiciales, acusándolos de obstruir el trabajo de la policía, contra activistas de la sociedad civil que mantenían bajo observación estos controles».