A partir del próximo 1 de enero de 2013 el Instituto de Cardiología de Madridcerrará sus puertas, cerca de 60 trabajadores interinos perderán su trabajo y aquellos con plaza fija serán trasladados al Hospital Clínico de Madrid, donde quedará adscrito.
El método de comunicación del cierre del Instituto fue a través del tablón de anuncios o cuando el presidente del comité de empresa, José Antonio Rivero, lo anunció.
Rivero señala que de esos cerca de 60 interinos muchos son personas cercanos a las sesenta años que serán despedidos tras más de diez años de antigüedad, con liquidación y prestación por desempleo, de esta forma aumentarán otra vez más la lista de parados en la región.
De esta forma el Gobierno regional incumple con su decisión de no cerrar ningún hospital de la comunidad de Madrid, ya que el Instituto Regional de Cardiología lo es. Ubicado cerca de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid cuenta con 38 camas de hospitalización, una sección especializada en pacientes cardiológicos y otra para medicina interna.
Encierro
Los trabajadores del Instituto de Cardiología han decidido encerrarse como medida de presión para evitar su cierre, y uniéndose así a la oleada de encierros que se vienen produciendo en los seis hospitales que van a ser privatizados y el Hospital de La Princesa y Carlos III.
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