La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha comprobado hoy los trabajos que el Ayuntamiento de la capital está realizando en la plaza de la Puerta del Sol y su entorno.
Junto al alcalde madrileño, José Luis Martínez-Almeida, ha destacado las “expectativas” que están generando estas obras porque “todo el mundo está deseando volver” a estos espacios, “el kilómetro cero de todas las carreteras del territorio nacional y el corazón de España”.
“Por aquí pasan a diario miles de visitantes, trabajadores, niños que están jugando o adultos que están realizando sus compras ante la impresionante oferta comercial de la zona, donde también los ciudadanos vienen a disfrutar de los mejores musicales, de cafeterías, restaurantes, tabernas… Este es un lugar de concentraciones, de grupos de turistas, de artistas callejeros y, por eso, en estas fechas navideñas volver a transitar por aquí con cierta normalidad va a ser un gran alivio para todos”, ha añadido.
Las obras en la zona suponen una inversión de 10,7 millones de euros, se traduce en la peatonalización total y definitiva de la plaza y de las calles que convergen en ella, así como la ordenación de todos sus elementos y la eliminación de obstáculos para garantizar la accesibilidad. La presidenta ha destacado el “tiempo récord” de las actuaciones y los adornos de vegetación que se va a incorporar.
Restos arqueológicos
La delegada de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid, Paloma García Romero, ha anunciado en una entrevista con Europa Press la aparición de nuevos restos arqueológicos en la Puerta del Sol, en la zona oeste, donde se ubicará tras la reforma la estatua ecuestre de Carlos III y la lámina de agua.
Según ha explicado, «normalmente estos restos no tienen valor, pero hay que mandar un arqueólogo, verlo y catalogarlo». El primer hallazgo se dio en el arco norte de la plaza, entre las calles Preciados y Carmen, algo que «es un hecho bastante habitual en obras que se llevan a cabo en el centro de la ciudad».
