Jesús P. H, la expareja de Juana Canal, fue detenido este miércoles 26 de octubre en Fuente el Saz, localidad madrileña, después de que el dispositivo de búsqueda se reactivara tras confirmarse «el pasado mes de junio que partes del cuerpo de Juana Canal habían sido halladas en la provincia de Ávila»
Juana Canal, vecina de Ciudad Lineal (Madrid), desapareció hace 19 años, el 22 de febrero de 2003, en Madrid, donde residía con su hijo y con su pareja. Ella fue vista por última vez en su barrio. En su domicilio se encontró una nota con el siguiente mensaje, escrito por el acusado: «Tu madre y yo hemos tenido una fuerte discusión y ha salido corriendo. He salido a buscarla, pero no la he encontrado«. Además, había signos de que en ese lugar se había producido una pelea.
En mayo de 2019, un senderista que paseaba por Navalacruz (Ávila) se encontró con un hueso. Los restos encontrados parecían humanos y el hombre se puso en contacto con la Guardia Civil. Varios agentes se trasladaron al lugar y los recogieron para ser analizados. Tras un cotejo del ADN del hueso, comprobaron que coincidía con el perfil genético de Juana Canal.
En junio de 2022, la policía comunicó a la familia que habían encontrado los restos de la mujer en Ávila, a más de 100 kilómetros del lugar donde fue vista por última vez, en el barrio madrileño de Ciudad Lineal. La Asociación SOS Desaparecidos fue la encargada de hacer pública la noticia y desactivó la alerta de búsqueda.
Este miércoles 26 de octubre se ha realizado la detención de Jesús P.H, antigua expareja de Juana Canal, como principal sospechoso por la desaparición de esta mujer aquella noche del 22 de febrero de 2003.
El hombre, ha sido arrestado en la localidad madrileña de Fuente el Saz de Jarama, donde residía, siendo llevado acto seguido a la comisaría de Torrejón de Ardoz, según apuntan fuentes policiales. Tal y como ha podido saber el diario El Mundo, el varón trabajaba como «feriante en un puesto de venta de comida rápida«.
Este jueves 27 de octubre, el principal sospechoso ha confesado ser el autor de los hechos y se ha declarado culpable de la muerte de la mujer. Según el diario El Mundo, lo delató una llamada telefónica. En la conversación decía que no creía que la Policía le pillase.
En las batidas realizadas unos días antes de la detención, se encontró el otro fémur y la cadera. Una de las hipótesis que se baraja es que la expareja de Juana descuartizó a la mujer y no actuó solo.