La Comunidad de Madrid promueve la iniciativa ‘A Villa Voz’, que aúna música clásica y promoción del turismo y se desarrollará en las once Villas de Madrid los fines de semana hasta el 3 de noviembre. Este fin de semana será el turno de Patones de Arriba y Torrelaguna.
El programa musical del ciclo, que está protagonizado por el Coro de la Comunidad de Madrid (Orcam), combina piezas del repertorio español más tradicional y castizo con composiciones más arriesgadas y vanguardistas de la música española contemporánea. De este modo, los asistentes a los conciertos de ‘A Villa Voz’ pueden disfrutar de una selección musical que va desde los coros de Doña Francisquita, Agua, azucarillos y aguardiente, La Chulapona, El año pasado por agua, Don Manolito y Madrid hasta la música de María de Alvear con su Einfanche Freiheit, y otras composiciones de Alejandro Yagüe, José Ignacio Prieto y Rodolfo Halffter.
Tras la primera parte del concierto, la dedicada a la selección más tradicional, se puede escuchar una reinterpretación sonora totalmente improvisada, a cargo de Alberto García Aznar, miembro de la Asociación de Música Electroacústica Española (AMEE).
Música y turismo madrileño
La consejera ha declarado que con ‘A Villa Voz’ “la Orcam acerca la música clásica de calidad a los madrileños y al mismo tiempo, es también una invitación a visitar las once Villas de Madrid, que sorprenden por la cantidad de recursos turísticos que ofrecen”.
El ciclo ‘A Villa Voz’, impulsado por la Consejería de Cultura y Turismo del Gobierno regional y gestionado por la Fundación Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid (Fundación Orcam) se celebrará todos los sábados y domingos comprendidos hasta el 3 de noviembre, en las once villas de Madrid: Manzanares el Real, Rascafría, Torrelaguna, Patones de Arriba, Buitrago del Lozoya, Nuevo Baztán, Colmenar de Oreja, Villarejo de Salvanés, Navalcarnero, Chinchón y San Martín de Valdeiglesias.
‘VILLAS DE MADRID’
El recorrido turístico ‘Villas de Madrid’ es una iniciativa del Gobierno de la Comunidad de Madrid, que tiene como objetivo diversificar el flujo de turistas hacia áreas menos visitadas de nuestra región. Comprende once localidades singulares de menos de 20.000 habitantes. La Comunidad de Madrid promociona así los atractivos turísticos de estas localidades que destacan por el valor de su patrimonio y por su autenticidad rural.
