El cannabidiol o CBD se ha convertido en un tema de conversación que despierta ciertas polémicas. Durante los últimos años sus propiedades y beneficios para la salud han ido multiplicándose y de hecho, esto ha generado un importante debate interno dentro de las organizaciones sanitarias internacionales. La experimentación científica ha dejado patente su valor terapéutico a partir de diferentes ensayos pero aún hoy la legislación no termina de integrar esta nueva realidad dentro de las normativas de consumo y comercio. Aún así, podemos encontrar establecimos donde adquirir CBD en Madrid, en Barcelona o en modalidad íntegramente online, porque hoy su consumo y comercialización es legal para algunos usos específicos.
Es importante tener en cuenta que el hecho de que en la actualidad exista un vacío legal en ciertos aspectos, no debe ser síntoma de riesgo o de alarma. Ya existen suficientes evidencias científicas que avalan la efectividad del CBD en el tratamiento y paliación de una gran cantidad de dolencias. Sin embargo, aún a día de hoy existe un gran desconocimiento generalizado sobre el cannabidiol por estar asociado con el cannabis, una planta natural bastante estigmatizada. La realidad, es que el cannabidiol no sólo se encuentra presente en la composición del cannabis. El cáñamo también cuenta con una importante concentración de este componente que poco tiene que ver con el famoso THC.
El vacío legal y la falta de una normativa en los países de la Unión Europea que esté adaptada a la evidencia científica, deriva en cierta inseguridad. No sólo a nivel de consumo, sino también a nivel de producción y comercialización.
Pero, ¿cuál es exactamente la situación legal del CBD en España y dentro del contexto de la Unión Europea? ¿Está permitido consumir, producir y comercializar productos ricos en CBD? La respuesta es sí, pero con matices.

El consumo de CBD no tiene un efecto adictivo ni genera efectos dañinos para la salud
El CBD se ha convertido en uno de los componentes naturales más estudiados en la comunidad científico-médica. Esta amplia experimentación ha arrojado resultados concluyentes: El cbd suministrado en dosis controladas puede generar diferentes efectos positivos sobre la salud.
Su efectividad habría quedado comprobada frente a dolencias tan variadas como la epilepsia, la artritis o el alzheimer. Tras años de ensayo y experimentación, finalmente las conclusiones adquirieron irrevocabilidad cuando la propia Organización Mundial de la Salud, máxima autoridad en materia de salud, emitió un comunicado hacia diciembre de 2017 en el que aseveraba su potencial terapéutico. Por otro lado, desvinculó al cannabidiol de los efectos nocivos que se atribuyen a la cannabis haciendo hincapié en que no se trata de una sustancia adictiva.
Sin embargo, la situación legal del cbd en el mundo es bastante variable dependiendo del país en que nos encontremos. En España, por ejemplo, el cannabidiol aún no ha sido registrado como un complemento alimenticio formando parte del listado de suplementos alimentarios autorizados por la AEMPS (Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios).
Dentro del listado se aglutina una selección de minerales y vitaminas autorizados para el consumo humano en correspondencia con la ley estatal. A nivel europeo, el cannabidiol continúa sin definir en la Directiva 2002/46/CE del Parlamento Europeo.
Aún así, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha decretado la restricción de todos los productos calificados como suplementos alimentarios que poseen CBD en todos los países miembros de la Unión Europea. En España este comunicado ha sido emitido por la Agencia para Asuntos del Consumidor, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN).
Como consecuencia, todos aquellos establecimientos especializados en la producción o comercialización de productos alimentarios ricos en CBD han quedado paralizados hasta que se implemente una regulación a nivel europeo.
Aunque esta medida en un principio estaba orientada a transmitir una mayor confianza en las autoridades de seguridad alimentaria, ha generado un efecto contrario. Las consecuencias se han reflejado en una desestabilización del tejido de productores y comerciantes cuyo mercado se ha visto mermado como consecuencia del vacío legal y la incertidumbre generada.
Entonces, ¿el CBD es ilegal?
En realidad no. La situación del cbd se encuentra en un limbo legal pues estrictamente no es ilegal porque no está auditado. Sin embargo, precisamente por ello tampoco es legal, al menos no para su comercialización como complemento alimentario. Hoy el cannabidiol ha sido calificado como “nuevo alimento” por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, pero no cuenta con ningún tipo de regulación.
El CBD es legal para uso tópico
En la mayoría de países europeos, incluyendo España, el cannabidiol puede ser comercializado y consumido legalmente siempre que se aplique externamente, es decir, como un producto orientado a finalidades cosméticas.
La Agencia del Medicamento de momento únicamente lo sopesa como un producto legal únicamente destinado al uso externo. De hecho, para que su comercialización esté en estricta concordancia con la ley, el producto debe incluir una etiqueta que especifique que únicamente puede ser consumido vía tópica. En conclusión, podemos decir que en la actualidad es ilegal vender cbd para consumo humano si no se hace como un producto técnico o como un producto de uso externo.