La Revolución de la Luz
La Esfera no es simplemente un edificio. Con 580,000 pies cuadrados de iluminación LED programable, produce imágenes realistas que cautivan la mirada a kilómetros de distancia. Pero la historia detrás de este monumento es aún más electrizante que los propios visuales.
Un Ambicioso Comienzo
La historia de la Esfera de Las Vegas comienza con el multimillonario James Dolan, el famoso propietario de los New York Knicks y los New York Rangers. Pero, ¿quién es realmente Dolan? Un hombre que no es ajeno a la controversia, que heredó fortuna y fama de su padre y llevó a los Knicks a una caída en picada.
Dolan: El Hombre Detrás del Sueño
Un Legado en Juego
Dolan nunca ha sido el más querido. No es un multimillonario hecho a sí mismo. Pero eso no le ha importado. Desde que vendió Cablevision en 2015, ha tenido una visión clara para la Esfera.
Un Símbolo de Prestigio
MSG, también propietaria del Madison Square Garden, es otra creación de Dolan. En 2016, sus ojos se posaron en Las Vegas, y lo que vio fue un edificio esférico que podría cambiarlo todo. En 2017, cortó la cinta en el sitio de la futura Esfera.
La Tecnología Detrás de la Magia
Un Avance en Imágenes
Para lograr la pantalla interna de 16K, se diseñó un sistema de cámara único, el «Big Sky», con un sensor de imagen HDR de 316 megapíxeles. El software de procesamiento de imágenes fue creado específicamente para Big Sky, lo que permite una captura detallada que supera a las cámaras 4K.
Retos y Triunfos
Una Historia de Superación
La construcción fue detenida en 2020 debido a la pandemia, y el proyecto superó el presupuesto. Dolan despidió al ejecutivo a cargo y tomó el control personalmente. Pero la apuesta ha dado frutos, con un aumento del 31% en las acciones de SPHR.
El Futuro de la Esfera
Innovación y Crecimiento
Desde producciones inmersivas hasta deportes electrónicos y una segunda esfera en Londres, hay innumerables jugadas de crecimiento emocionantes en el futuro de la Esfera. Dolan ha logrado una posición para cambiar el entretenimiento, y la ‘próxima gran cosa’ es U2, prometiendo empujar los límites de lo conocido.
La Esfera de Las Vegas no es solo un edificio; es una declaración, una visión, y quizás el legado de un hombre que se niega a ser definido por los demás. Es la prueba viviente de que estamos al borde de una nueva era en el entretenimiento.
