Es una de las primeras medidas del proceso de descentralización que el Ayuntamiento de Madrid está llevando a cabo para dotar de mayor competencias a las juntas. Las Juntas de Distrito mejorarán también su capacidad de autorizar directamente actos en la vía pública y ampliarán su competencia para firmar convenios directos de colaboración.
Durante este año 2016 se han desarrollado los primeros trabajos en el marco del proceso de descentralización iniciado por el Ayuntamiento de Madrid, que han dado como resultado una primera transferencia de recursos y competencias a las Juntas Municipales de Distrito. Este primer paquete de competencias transferidas corresponde primordialmente a materias de deportes; mejora de la gestión de los actos en la vía pública; y una mayor capacidad de los distritos para realizar convenios directos de colaboración. Todo ello implica una modificación de las competencias del Área de Cultura y Deportes, la de Coordinación Territorial y Asociaciones, Gerencia de la Ciudad y de las propias Juntas Municipales de Distritos, que eran las que ejercían estas capacidades.
El objetivo último es que los distritos puedan gestionar los servicios públicos que tienen asignados con criterios de eficiencia y proximidad a la ciudadanía, y poder así mejorar la calidad de vida de la vecindad y de la democracia.
El proceso de descentralización se ha concebido desde el inicio de una forma integral y participada, por lo que se ha contado con todas las áreas de Gobierno -cuyas competencias serán descentralizadas- y las concejalías de los distritos. El proceso además se ha abordado desde sus inicios en una mesa política compuesta por todos los partidos que componen el pleno del Ayuntamiento, ya que la descentralización tiene que ser un proyecto de ciudad y no de legislatura.
Unidad de Deporte
Para abordar este primer paquete de competencias descentralizadas, se creará una Unidad de Deporte que asumirá el desarrollo de la política de promoción del deporte en el distrito y la gestión de sus instalaciones deportivas. Se traslada a las Juntas Municipales de Distrito la competencia para aprobar los programas deportivos de sus instalaciones y coordinar las mismas.
En cuanto a las instalaciones deportivas básicas, es éste el momento adecuado para diseñar e implantar un modelo de cooperación público-social que permita la gestión de las instalaciones deportivas en colaboración con las diversas entidades deportivas de base y permita una gestión de las mismas, compatibilizando el interés municipal y el social.
Asimismo, para mejorar la gestión de las instalaciones deportivas de sus respectivos distritos, éstos contarán en materia de recursos humanos con capacidades para dirigir el personal de sus instalaciones de forma más ágil y coherente con sus necesidades concretas.
Los distritos podrán proponer las modificaciones de las relaciones de puestos de trabajo de las instalaciones así como autorizar la movilidad sin funciones del personal que trabaja en las instalaciones para poder atender de forma más adecuada a las diferentes necesidades de personal que puedan surgir en los distritos, y prestar así un mejor servicio deportivo a las vecinas y vecinos. Esta competencia correspondía anteriormente a la Dirección General de Recursos Humanos.
