«Como falsa terapia que es, sin avales científicos y aprovechándose de la laxitud de la ley que la intenta regular, se introduce en nuestro ejercicio a muchos niveles…» explicaba el grupo de farmacéuticos firmantes. Con ello, quieren reivindicar que es una práctica que «no es más que un engaño que lleva 200 años con sus artes».
Con ocasión del Día Internacional del Farmacéutico, celebrado el 25 de septiembre de 2016, un grupo de profesionales de este sector ha decidido publicar un manifiesto contra la homeopatía. En este se pide a los representantes de esta práctica que salgan del mundo de la farmacia.
Según la Sociedad Madrileña de Medicina Homeopática, la homeopatía es un método terapéutico que utiliza medicamentos que se preparan a partir de productos de origen vegetal, animal o de productos químicos (minerales u orgánicos). Sin embargo, esta práctica es una pseudoterapia que jamás ha conseguido efectos convincentes más allá de lo que se logra con un sucedáneo que funciona como placebo. Niega los principios de la física y la química, no tiene ningún efecto farmacológico y a pesar de eso sus consumidores piensan que a ellos les funciona.
Acogida sin pudor y con una oficialidad que no debe tener
«Como falsa terapia que es, sin avales científicos y aprovechándose de la laxitud de la ley que la intenta regular, se introduce en nuestro ejercicio a muchos niveles: farmacias que la dispensan y recomiendan, universidades que se atreven a enseñarla (pocas afortunadamente), sociedades que se llaman ‘científicas’ que la incluyen en sus guías terapéuticas y nuestro más importante órgano representativo, el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, que la acoge sin pudor y le da una oficialidad que no debe tener», explica este grupo de profesionales en su nota de prensa.
Esta pseudoterapia se fundamenta en la administración de cantidades infinitesimales de sustancias que, si se aplicaran en grandes proporciones a un individuo sano, producirían los mismos síntomas que se pretenden combatir. Se supone que estos productos son más efectivos cuanto más diluidos están.
Según explican los farmacéuticos firmantes, no pertenecen a ninguna organización que los agrupe y, después de lanzar esta carta, organizarán más actividades en las que se incluirán a otros colectivos como estudiantes, médicos, fisioterapeutas, matronas, químicos, físicos «y todo aquel que tenga criterio para confirmar que la homeopatía no es más que un engaño que lleva 200 años con sus artes, pero que tiene los días contados», afirman.
CARTA ABIERTA AL MINISTERIO DE SANIDAD, ASUNTOS SOCIALES E IGUALDAD, PRESIDENTE DEL CONSEJO GENERAL DE COLEGIOS OFICIALES DE FARMACÉUTICOS, A LOS DECANOS DE LAS FACULTADES DE FARMACIA Y PRESIDENTES DE SOCIEDADES CIENTÍFICAS FARMACÉUTICAS
Los abajo firmantes con motivo del DÍA INTERNACIONAL DEL FARMACÉUTICO, licenciados todos en farmacia, y ejerciendo en los diversos sectores de nuestra profesión, nos dirigimos a Vds. para que intervengan y demanden que la homeopatía no sea avalada por ninguna organización científica, gubernamental, universitaria ni profesional farmacéuticas: Ministerio de Sanidad, Colegios Oficiales de Farmacéuticos, Facultades de Farmacia ni sociedades científicas.
Los motivos que nos llevan a expresar esta petición son de índole científica, técnica, ética y profesional. Como profesionales sanitarios que somos y conscientes de nuestra importancia como técnicos en el Sistema Nacional de Salud, apostamos por que nuestro ejercicio profesional esté siempre sustentado en criterios científicos y técnicos validados, así como acordes con la legislación vigente.
Mucha gente cree hoy en día la que la HOMEOPATÍA es una terapia válida y sus productos reciben el nombre de MEDICAMENTOS sin que exista ningún aval científico que así lo demuestre, permitiéndose la comercialización de productos con indicación terapéutica que incumplen toda la legislación y normativa sanitarias y a la que están sometidos los verdaderos medicamentos.
También se introduce en Colegios de Farmacéuticos que cuentan hasta con vocalías “ex profeso” y hasta ofrecen formación a sus colegiados, incumpliendo sus estatutos y códigos éticos, que rezan:
16.- El farmacéutico proporcionará una información veraz y adecuada a cada paciente, no fomentando en ningún caso expectativas terapéuticas injustificadas o inadecuadas y promoviendo su derecho a la prevención y diagnóstico de la enfermedad y a tratamientos eficaces y seguros
Llega a aparecer en guías clínicas de sociedades científicas, menospreciando así el valor que la ciencia puede dar a la terapéutica moderna.
Hay facultades de farmacia que incluyen en sus planes de estudios asignaturas de esta falsa terapia, dañando la imagen de la universidad y la profesión al incluir la homeopatía con el resto de los tratamientos científicos, sin ninguna evidencia que la respalde. Porque la homeopatía no es ciencia ni ha curado a nadie de nada en más de 200 años.
Por eso, apelamos a la profesión farmacéutica para que no permita que el engaño de la llamada “terapéutica homeopática” esté presente en nuestro ejercicio profesional ni en OFICINAS NI SERVICIOS DE FARMACIA, donde se le da un indebido amparo científico. Todo esto sin olvidar el peligro que conlleva para los pacientes el remplazo o abandono de terapias que sí han demostrado su efectividad.
Esperamos su apoyo y colaboración para que la homeopatía deje de tener el aval de nuestra profesión en su ámbito de actuación y trabajo.
Atentamente.