Los gatos al igual que las personas y otros animales, pueden sufrir un golpe de calor con las altas temperaturas este verano. Por eso es necesario seguir algunos consejos para prevenir un golpe de calor o saber qué hacer si ya le ha dado.
El golpe de calor en felinos es muy peligroso pudiendo incluso ser mortal. Algunos hábitos en verano ayudan a prevenir al animal de un golpe de calor.
Lo principal es que el animal no sufra deshidratación ya que es muy común con la llegada del calor. Mantener al felino en un lugar tranquilo y fresco le ayudará a no alterarse ni a entrar en un estado de alteración.
Para mantener al animal fresco, debemos colocar toallas húmedas con agua fría sobre los lugares donde el gato suele descansar. No hay falta que la toalla esté en contacto directo con el animal sino que se recomienda usar un tejido transpiran entre la zona humedecida y el animal.
Aunque también se puede refrescar al animal con toallas húmedas encima de él y así refrescar su piel. Esto se puede hacer un par de veces al día.
Síntomas
Los síntomas de un golpe de calor son el mostrase inquieto, respiración con dificultad y acicalarse demasiado. Además la boca y lengua del felino puede enrojecer y hasta vomitar.
Qué hacer en caso de golpe de calor
Si el animal hubiese sufrido un golpe de calor, lo primero será retirarle de la zona de calor, cubrirle con una toalla húmeda, proporcionarle agua sin obligarle tampoco, medir la temperatura corporal y acudir de inmediato a un veterinario.
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