La mañana de hoy marcó una fecha a recordar en el desarrollo urbanístico de Madrid con la presentación de SOLANA, un ambicioso proyecto que promete transformar la zona norte de la capital. En un evento simbólico, se llevó a cabo la colocación de la primera piedra, dando inicio a unas obras que no solo buscan construir viviendas, sino también crear un nuevo modelo de convivencia urbana. Con la presencia de destacados representantes del ámbito político y empresarial, SOLANA se perfila como la conexión residencial entre Madrid y Alcobendas.
Un Proyecto con Visión Metropolitano
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, fue uno de los oradores principales en el evento. En su discurso, subrayó la importancia de SOLANA como un puente hacia el área metropolitana. “Este desarrollo no solo conectará Madrid con Alcobendas, sino que también fomentará una interactividad sin precedentes entre las comunidades”, afirmó Almeida. Este objetivo se alinea con la ambición de alcanzar una ciudad donde todo esté accesible en un radio de 15 minutos, un principio que está ganando fuerza en las políticas urbanas contemporáneas.

SOLANA se sitúa entre La Moraleja y Valdebebas, en una área que alguna vez fue agrícola pero que ahora carece de uso productivo. A tan solo 15 minutos del centro de Madrid, este nuevo barrio tiene el potencial de convertirse en un referente en calidad e innovación urbanística.
Una Comunidad Inclusiva y Sostenible
El presidente de la Junta de Compensación, Manuel Jordán, destacó las características únicas del proyecto: “Estamos convencidos de que SOLANA será un modelo a seguir por su enfoque en la calidad y la sostenibilidad”. Con más de 1 millón de metros cuadrados disponibles, el desarrollo contempla la construcción de 1.393 viviendas, donde el 46% estarán destinadas a protección pública. Esta decisión busca fomentar el acceso a la vivienda y promover una integración social efectiva.
Los espacios destinados a equipamientos públicos y privados serán amplios y estratégicamente ubicados. Esto permitirá no solo cubrir las carencias existentes en el entorno urbano, sino también facilitar el acceso a servicios esenciales para los residentes. “Es fundamental que las infraestructuras estén conectadas con zonas verdes y vías principales para garantizar una vida cómoda y accesible”, añadió Jordán.

Innovación Ecológica: Un Diseño Sostenible
SOLANA no solo se preocupa por el bienestar social; también integra principios ecológicos avanzados. El diseño del proyecto busca minimizar su impacto ambiental mediante una disposición inteligente de los edificios que aprovecha las corrientes naturales para optimizar el clima interior. Esta estrategia no solo reduce los costos energéticos durante el invierno y verano, sino que también contribuye a un entorno más saludable para sus habitantes.
Con más de 290.000 metros cuadrados dedicados a espacios verdes, SOLANA incluirá corredores peatonales y carriles para bicicletas que priorizan el tránsito no motorizado. Este enfoque no solo promueve estilos de vida activos, sino que también fomenta la biodiversidad local mediante la reforestación con más de 4.600 árboles. Estos esfuerzos buscan crear hábitats para la fauna local y contribuir a la regeneración del ecosistema urbano.
Un Legado Duradero
El gerente del proyecto, Eduardo Campo, compartió su visión sobre SOLANA: “Este desarrollo nace bajo un lema claro: creerlo para hacerlo”. La idea es dejar un legado duradero en Madrid que combine modernidad con respeto por la naturaleza. La colaboración entre entidades públicas y privadas ha sido clave para hacer realidad esta ambición.
El evento inaugural contó con la presencia de figuras destacadas como Paloma García Romero y Borja Carabante, quienes reafirmaron su compromiso con este proyecto transformador. La participación activa de diversas partes interesadas refuerza la idea de que SOLANA es más que un simple desarrollo inmobiliario; es una propuesta integral para mejorar la calidad de vida en Madrid.