Victoria del Alcobendas-Levitt frente al Villanueva del Pardillo. De esta forma el equipo alcobendense consigue su primera victoria en Tercera División.
Con el recuerdo del ya mítico partido disputado en el pasado mes de mayo en su feudo -y que certificó el ascenso de los verdes a Tercera- llegó el Villanueva del Pardillo hasta el “Luis Aragonés” de Alcobendas. Y así, frente a frente, los dos recién ascendidos del Grupo 1 de Preferente. Y así, la confianza del equipo local en conseguir la primera victoria de la temporada.
Para ello Paco Ramírez dispuso un once titular correoso, vertical y con firme vocación de ir inmediatamente en busca de la portería visitante… La inclusión en el mismo de jugadores como Sito, Malote, junto a los Sory, Borja… daban cumplida fe de ello. Precisamente fue este quien en la mitad de la primera parte tuvo una ocasión clara debajo de los palos para adelantar a los verdes en el marcador. Con intensidad y juego por las bandas continuaron los locales su decidida apuesta por hacer mover el marcador, tan solo mitigada por pequeńas fases de tibio dominio de los visitantes de Agustín Vara en el centro del campo.
La reanudación dejó ver con mayor nitidez las intenciones de los del Alcobendas Levitt. Tanto que, durante los diez primeros minutos, tan solo el fallo de un penalti por parte de Víctor y cometido sobre “el hombre del partido”, Sito, y un increíble error bajo palos y a puerta vacía de Malote tras una brillante jugada personal de magia y chistera evitaron la certificación con solvencia de la primera victoria en la categoría. Que comenzaría a labrarse, sin embargo, a falta de 25 minutos para el final, gracias al inesperado gol del mismo Malote que llegó hasta el fondo de las mallas ajustado junto al poste derecho del portero visitante Victor.
A partir de ahí, los locales, supieron leer perfectamente el partido y, casi sin sobresaltos, sentenciaron un triunfo que anhelaban desde el inicio de la competición hace cuatro jornadas cuando, en el descuento, frente al local Pinto fueron privados de un triunfo que ya parecía seguro.