En cuanto a los datos mundiales, las actividades más comunes durante la conducción son utilizar el teléfono (69 %), beber (36 %) y comer (32 %); seguidas del envío de mensajes de texto (17 %) y el uso de las redes sociales (el 8 %), según la fuente.
Según un informe anual de LeasePlan divulgado el pasado martes, 13 de diciembre, el 71 % de los conductores españoles reconoce hablar por teléfono mientras conduce, mientras que el 27 % asegura que aprovecha para beber y el 15 % para comer. El estudio, realizado a 4.000 personas de 17 países distintos, refleja que el 13 % de los conductores afirma que envía mensajes de texto y el 6 % consulta las redes sociales.
En cuanto a los datos mundiales, las actividades más comunes durante la conducción son utilizar el teléfono (69 %), beber (36 %) y comer (32 %); seguidas del envío de mensajes de texto (17 %) y el uso de las redes sociales (el 8 %), según la fuente. Otros datos destacados del estudio están relacionados con que el 60 % de los consultados ha observado excesos de velocidad de otros conductores y que la mitad de ellos reconoce hacer lo mismo.
Estos datos revelan que el 81 % de los conductores realizan varias actividades mientras están al volante de sus vehículos y que los resultados generales son ligeramente mejores en comparación con los obtenidos en 2014, cuando la cifra ascendía al 84 %.
Habitual no respetar la distancia de seguridad
En España, el 57 % de los que han participado en la muestra dicen que es muy habitual tener un coche detrás del suyo que no respeta la distancia de seguridad.
Siguiendo los datos del informe, el 71 % de los conductores de los 17 países admite incurrir en excesos de velocidad, siendo los griegos, españoles y australianos los que menos superan los límites (55 %, 61 % y 64 %, respectivamente).
Para el consejero delegado de LeasePlan España, Alberto Sáez, «la multitarea, la agresividad y el exceso de velocidad son las causas principales de los accidentes de tráfico».
En Europa, el coste medio de un accidente de tráfico es de 700 euros, se resalta en el informe, en el que también se señala que el del combustible supone un desembolso de unos 2.000 euros por año.