Con la llegada del calor, aumenta también la necesidad de hidratarse y, por tanto, de utilizar las fuentes públicas.

Por ese motivo, y como ocurre con regularidad, estos días, el Ayuntamiento, desde el departamento de Medio Ambiente y el Laboratorio Municipal, está realizando una nueva campaña de control de dichas fuentes.
El objetivo principal es garantizar la salubridad, calidad y limpieza de las fuentes y proteger así la salud de los vecinos.
Garantizar la calidad del agua
Sobre las muestras de agua recogidas, los análisis realizados son los que marca la legislación vigente, por la que se establecen “los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humano” (Real Decreto 902/2018).

Los parámetros analizados en el Laboratorio Municipal son, en primer lugar, de tipo fisicoquímico: olor, sabor, color, cloro, turbidez, conductividad, pH y amonio.
Pero, además de lo anterior, la analítica incluye la detección de microorganismos indicadores de contaminación y algunos posibles patógenos.
Todos estos parámetros son analizados cumpliendo un sistema estricto de aseguramiento de la calidad, que está implantado en el Laboratorio Municipal por su acreditación, según la Norma ISO 17025, por ENAC (Entidad Nacional de Acreditación) y por la Certificación ISO 9001:2015.
En caso de incumplimiento de los valores normativos, se tomarán las medidas oportunas para corregir las deficiencias.