Aumentan las denuncias de padres maltratados por sus hijos. Según Roberto Pereira, del Centro de Intervención en Violencia Filioparental Euskarri, se han multiplicado por cuatro en los cinco años últimos. Además destaca el largo período de tiempo que pasa desde el primer momento de violencia: 18 meses, hasta que los padres lo denuncian.
Según este estudio los chicos agraden igual que las chicas: un 3,2% de los adolescente de entre 13 y 17 años han agredido físicamente a sus padres y el 14% lo ha hecho verbalmente.
Las madres son víctimas en mayor medida que los padres, ya que están más implicadas en el cuidado de los hijos y los asuntos familiares.
El estudio también señala que es más frecuente en las familias sobreprotectoras de los hijos; en las negativas (que delegan las responsabilidades educativas en la escuela) y permisivas (padres «amigos» de los hijos).