Relajarse en verano, durante el periodo de vacaciones, no es tan fácil para algunas personas. Las personas de naturaleza activa o con trabajos estresantes no tienen más problemas para desconectar de su vida laboral y disfrutar de las vacaciones.
Consejos
- Adaptar las vacaciones a la personalidad: las personas muy activas deben adecuar sus días de descanso a su nivel de actividad, aunque siempre separándolas de su vida laboral.
- No seguir consejos de familiares y amigos: en el caso de que el problema no pueda ser eliminado, acceder a profesionales, pero nunca seguir los consejos de familiares o amigos ya que cada persona necesita diferentes tipos de desconexión.
- Descansar la mente y el cuerpo: es muy importante que, sobretodo nuestra mente, entre en un estado de descanso. Por ello, se recomienda cambiar de ritmo y de actividad, permitiéndonos tiempo y espacio libre: nuestra propia habitación, nuestro tiempo, nuestro espacio, exclusivamente para nosotros.
- No es necesario hacer largos viajes: existen lugares recurridos que son impuestos por el imperativo social, donde se llenan nuestras horas de relax con multitud de actividades. Lo ideal es conseguir calma, serenidad y tranquilidad.
- Crear hábitos individuales: aunque se necesita descanso, no se deben perder los hábitos individuales para la estabilidad mental de cada persona.
- Reflexionar: las vacaciones son el momento perfecto para reflexionar sobre nuestra vida, en lo que hacemos a diario, ¿es lo que nos gusta? ¿nos hace felices? ¿Queremos cambiar algo?
Dividir las vacaciones
Dentro de los días de descanso, se deben distinguir dos periodos: el primero hace referencia a los días en los que es necesario un descanso físico, un sueño reparador. Mientras que, la segunda parte tiene un componente más lúdico.
[calameo code=00000211789e817dcc664 width=640 height=380]