La edad, la dieta y el estilo de vida en general son aspectos importantes para controlar el cansancio. Según el boletín digital de la Clínica Cleveland Tanya Edwards, hay diversos factores que afectan directamente a este estado mental y físico.
Consejos para controlar el cansancio
- Una dieta basada en la comida basura: las dietas que son altas en grasas trans, grasas saturadas, alimentos procesados y azúcares añadidos pueden hacer caer la energía. Se recomienda cambiar a una dieta alta en fuentes de proteínas buenas, sobre todo pescado, frutos secos, semillas y judías. Sin embargo, hay que tener cuidado con los cereales porque estos carbohidratos complejos afectan a la insulina.
- Pérdida de nutrientes: las prácticas de agricultura intensiva actuales eliminan del suelo los minerales clave que combaten el cansancio, por lo que se debe tomar un suplemento multivitamínico y mineral.
- Insuficiente omega-3: el pescado es rico en ácidos grasos omega-3 pero la mayoría de las personas no toma el suficiente.
- Vitamina D bajo mínimos: esta vitamina proporciona energía. Los bajos niveles de vitamina D pueden producir depresión.
- Bajos niveles de magnesio: el ser humano nace con una cantidad limitada de magnesio, también necesario para la producción de energía, en huesos y músculos. Una gran parte de la población toma menos de la mitad de la cantidad necesaria de este mineral a través de la dieta. Este déficit provocan insomnio, cansancio, estreñimiento, dolores musculares y articulares, ansiedad y presión sanguínea alta.
- Sueño pobre: en lo que se refiere a dificultades para dormir, las condiciones de este problema se suelen dar entre los 40 y 60 años. Las razones para la pérdida de sueño incluyen mayores responsabilidades laborales, vivir con adolescentes, padres ancianos y una bajada de los niveles de magnesio. Además, en el caso de las mujeres, la menopausia y la perimenopausia son también factores a tener en cuenta.
- Una vida sedentaria: no realizar suficiente ejercicio puede hacer que nos sintamos cansados. El ejercicio regular promueve la energía así como el estado de ánimo y el nivel de forma física.
Si los cambios saludables en la dieta, el sueño y el ejercicio no mejoran el cansancio tras un par de meses se puede probar tanto con las vitaminas del complejo B como con la coenzima Q10. Las primeras ayudan al organismo a producir energía y la segunda ayuda a las enzimas a producir energía en las células. Además, la acupuntura puede también ayudar a controlar el cansancio, el sueño, el dolor y los sofocos.
