La Comunidad de Madrid ha dado un paso decisivo hacia la mejora de la movilidad rural, con la inversión de 900.000 euros para garantizar la continuidad del servicio de transporte a demanda en 42 municipios de la Sierra Norte. Este impulso forma parte de la estrategia autonómica para revitalizar las zonas rurales, un proyecto que ha demostrado ser clave en la conexión de pequeños núcleos de población con otras localidades con mayores infraestructuras.
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado recientemente la renovación de un convenio con la Mancomunidad Valle Norte del Lozoya, que permitirá financiar esta iniciativa hasta el 2026. Este servicio facilita la movilidad de los vecinos de municipios de menos de 450 habitantes, permitiendo su traslado a poblaciones con más recursos y en condiciones de igualdad.
Desde su lanzamiento en 2020, el servicio ha beneficiado a más de 33.000 madrileños, que disfrutan de un servicio eficiente de transporte mediante 28 licencias de taxi. Se han realizado más de 78.000 traslados y se establece una tarifa fija de 4 euros por viaje (hasta 40 kilómetros), con una tarifa de 8 euros para trayectos más largos. Estos traslados están subvencionados en su mayoría, con un importe medio por trayecto de alrededor de 20 euros, lo que asegura que el servicio sea accesible a los usuarios.
¿Cómo ha crecido el programa de transporte a demanda?
El éxito de este servicio se ha ido ampliando año a año. Inicialmente concebido para 10 localidades, el programa ha alcanzado las 42 localidades actuales. En 2022, se unieron La Cabrera y, en 2023, se sumaron otros municipios como El Atazar, Bustarviejo, y Cabanillas de la Sierra. Este año, Torrelaguna y El Vellón se unieron a esta red, fortaleciendo la conectividad en una región que ha venido buscando maneras de facilitar el acceso a servicios básicos para los vecinos de pueblos aislados.
El crecimiento del programa está motivado por una clara demanda de estos pueblos, que históricamente han estado desconectados de otras poblaciones, y cuyas infraestructuras de transporte público tradicional son limitadas. La estrategia de revitalización rural de la Comunidad de Madrid ha encontrado en el transporte a demanda una herramienta esencial para hacer frente a este reto.
La inclusión de coches eléctricos: una nueva etapa para la sostenibilidad
Durante su reciente visita a Corea del Sur, la presidenta Isabel Díaz Ayuso adelantó que el Gobierno regional está considerando la introducción de vehículos eléctricos dentro del programa de transporte a demanda. Este cambio no solo mejorará la sostenibilidad del proyecto, sino que también contribuirá a la reducción de la huella de carbono de una región donde la conciencia ecológica está ganando terreno.
Además de facilitar la movilidad, el uso de coches eléctricos podría ayudar a diversificar el modelo de transporte, aumentando la flexibilidad del servicio y brindando una opción aún más ecológica para los residentes de estas zonas rurales.
Más de 78.000 traslados: un balance positivo para la Comunidad
Con más de 78.000 traslados realizados desde su inicio, este servicio ha demostrado ser una solución eficaz y valorada por los vecinos de la Sierra Norte. El transporte a demanda no solo está mejorando la calidad de vida de los residentes, sino también reduciendo la soledad en los municipios más pequeños y permitiendo a los habitantes acceder a servicios médicos, educativos y comerciales sin depender de vehículos privados o del transporte público convencional.
Un proyecto que sigue creciendo
El programa de transporte a demanda en la Sierra Norte de Madrid sigue demostrando ser un éxito rotundo. A medida que la red de localidades se expande y se implementan mejoras como el uso de vehículos eléctricos, la Comunidad de Madrid continúa reforzando su compromiso con la revitalización rural y la mejora de la movilidad en áreas rurales. El futuro de las zonas más pequeñas parece cada vez más conectado y accesible gracias a iniciativas como esta.