El Hospital Gregorio Marañón habilita un edificio de investigación en Medicina y Cirugía Experimental. La instalación, con 2.000 metros cuadrados, es única en España por el conjunto de equipos de imagen que alberga. El hospital mantiene activos más de mil ensayos clínicos y proyectos de investigación.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Rodríguez, ha visitado el edificio de Medicina y Cirugía Experimental del Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Estas instalaciones, de 2.000 metros cuadrados, estarán dedicadas a la investigación biomédica y albergan áreas y equipamiento como quirófanos experimentales, un animalario, laboratorios generales, tecnología de imagen para pequeño animal de experimentación, citómetro de flujo, área de cultivos celulares y microscopio confocal (tecnología que permite observaciones a una resolución mayor que la que se puede lograr con la microscopía óptica convencional).
Esta instalación es única en España por el conjunto de equipos de imagen que la forman y que permitirán la potenciación y avance en la investigación. Con estos aparatos se puede combinar información anatómica proporcionada por la RM (Resonancia Magnética) e información metabólica proporcionada por la PET, y además cuenta con la ventaja de realizar ambos estudios al mismo tiempo en una misma exploración.
Dentro de estos sistemas destacan un sistema híbrido PET-CT con CT helicoidal y un sistema híbrido PET-Resonancia de 3 Teslas, ambos para exploración por imagen de pequeños animales. Estos sistemas se pueden utilizar para estudios oncológicos, cardiológicos, neurológicos, psiquiátricos, entre otros, siendo las principales aplicaciones la detección y determinación del grado de una enfermedad, así como en la monitorización de la respuesta a un tratamiento farmacológico concreto.
La instalación también dispone de un microscopio SPIM de plano láser, con super-resolución, que permite la visualización en 3D de muestras microscópicas in vivo. Las instalaciones cuentan también con un laboratorio de radiofarmacia que muy pocas instituciones biomédicas tienen y en la que se pueden marcar moléculas in situ para su uso en investigación y evaluar el comportamiento de estas nuevas moléculas in vivo para su posible traslación a la clínica.