Un estudio realizado por un grupo de investigadores de la universidad alemana Ruhr-Universität Bochum, ha descubierto que la explicación a que una persona sea zurda o diestra no está en el cerebro, sino en la médula espinal.
Este grupo de científicos formado por el Dr Sebastian Ocklenburg, Judith Schmitz y Onur Güntürkün, especializados en neurobiología, han demostrado que la actividad genética en la médula espinal es asimétrica ya desde el útero. Una preferencia por el uso de la izquierda o la derecha puede ser causa de esta asimetría.
«Estos resultados, fundamentalmente, cambian nuestra comprensión de la causa de las asimetrías hemisféricas», concluyen los autores.
Se es zurdo o diestro desde el útero
Hasta la fecha, se había asumido que las diferencias en la actividad genética del hemisferio derecho y del hemisferio izquierdo podrían ser responsables de la destreza de una persona. Sin embargo, con este estudio se demuestra que lapreferencia por mover la mano izquierda o derecha se desarrolla en el útero a partir de la octava semana de embarazo, de acuerdo con los escáneres de ultrasonido realizados en la década de 1980. A partir de la 13ª semana de embarazo, los fetos tienen preferencia por uno de los dos pulgares a la hora de llevárselo a la boca.
Los movimientos del brazo y la mano se inician a través de la corteza motora en el cerebro, que envía una señal correspondiente a la médula espinal, que a su vez traduce el comando en un movimiento. La corteza motora, sin embargo, no está conectada a la médula espinal desde el principio, e Incluso antes de las formas de conexión, los precursores de la mano se hacen evidentes. Esta es la razón por la que los investigadores han asumido que la causa de la preferencia izquierda derecha debe estar enraizada en la médula espinal en lugar de en el cerebro.
La influencia de factores ambientales
Los investigadores analizaron la expresión genética en la médula espinal desde la octava a la decimosegunda semana de embarazo y detectaron diferencias marcadas de derecha a izquierda en la octava semana, precisamente en aquellos segmentos de la médula espinal que controlan los movimientos de brazos y piernas. Otro estudio había demostrado que los fetos realizan movimientos asimétricos de la mano en esta fase de la gestación.
Los investigadores, además, rastrearon la causa de la actividad genética asimétrica. Los factores epigenéticos parecen estar en la raíz de la misma, reflejando las influencias ambientales. Esas influencias podrían, por ejemplo, conducir a enzimas que enlazan grupos metilo con el ADN, lo que a su vez afectaría y minimizaría la lectura de genes. Como esto ocurre en una medida diferente en la médula espinal izquierda y derecha, hay una diferencia en la actividad de los genes en ambos lados.