El Ayuntamiento de Colmenar Viejo ha confirmado hoy un avance crucial en la tramitación del proyecto de la planta de biogás. Se trata de la aprobación inicial de la calificación urbanística necesaria para modificar el uso del suelo donde se proyecta la instalación, un requisito indispensable para su desarrollo. Esta planta, que ha generado un intenso debate en la localidad y municipios vecinos, está diseñada para el tratamiento de materia orgánica.
Según las declaraciones a los medios de comunicación del alcalde de Colmenar Viejo, Carlos Blázquez, la aprobación inicial de esta calificación urbanística es un hito relevante. El regidor ha destacado la exhaustividad del proceso de evaluación, afirmando: “Efectivamente, lo que se ha aprobado hoy es la aprobación inicial de la calificación urbanística donde han concurrido 33 informes de todas las áreas sectoriales, tanto de la Comunidad de Madrid internos como de las diferentes administraciones”. El alcalde ha resaltado la cantidad y la diversidad de organismos que han emitido sus dictámenes, enfatizando la rigurosidad en la fiscalización del proyecto de la planta de biogás.
Aval institucional y técnico: una planta «segura»
El volumen de informes sectoriales que han concurrido en esta aprobación inicial es notable. Blázquez ha especificado que los dictámenes provienen de múltiples estamentos de control, tanto a nivel autonómico como nacional, y que abarcan aspectos muy sensibles para la ciudadanía. “Podemos destacar informes como salud pública, medio ambiente, confederaciones hidrográficas, decir, incluso de defensa, de aeropuertos”, ha detallado el alcalde.
El alcalde ha insistido en que estos informes son el mejor respaldo a la viabilidad y seguridad de la futura instalación. “Creo que hay un amplio abanico de informes que lo están garantizando, siempre he manifestado y siempre he dicho, que esa planta es una planta segura”, ha asegurado Blázquez, reiterando su postura pública en defensa del proyecto.
La planta, que tiene como finalidad la valorización de materia orgánica, se presenta como una solución para transformar residuos y generar energía. “Una planta que se dedica a tratar materia orgánica y transformarla y darle una segunda vida en forma de energía, y que por supuesto está avalada por todas estas administraciones que han informado, por todos esos funcionarios que son expertos en tratar cada una de esas materias”, afirmó el primer edil, apelando a la profesionalidad de los técnicos y a la normativa vigente. El proceso, según el alcalde, está “garantizando precisamente y velando por la seguridad, así como toda la normativa europea y española que precisamente velan para que no haya ningún problema”.
Apertura del plazo de alegaciones y tramitación final
La aprobación inicial de la calificación urbanística no es el paso definitivo para la planta. El procedimiento establece ahora un periodo de exposición pública para que los ciudadanos y las entidades puedan presentar sus argumentos o consideraciones. Este trámite, esencial en cualquier desarrollo urbanístico, garantiza la participación ciudadana.
El alcalde de Colmenar Viejo ha explicado el recorrido administrativo que sigue a esta aprobación inicial: “A partir de aquí, habrá un plazo de exposición para que haya alegaciones, se resuelvan las alegaciones y finalmente, cuando concurran, si concurren todos los informes positivos, se concederá la licencia definitiva”. Este periodo de alegaciones será clave para que los vecinos, las plataformas en contra del proyecto como Stop Biogas Colmenar Viejo Tres Cantos, y otros grupos de interés puedan presentar sus argumentos, los cuales deberán ser estudiados y respondidos por la administración antes de la aprobación final.
Respuesta a las acusaciones de oscurantismo de la oposición

Uno de los puntos abordados por el alcalde Blázquez en las declaraciones a los medios de comunicación ha sido la crítica de la oposición municipal, en concreto del grupo Ganemos Colmenar, que recrimina al equipo de gobierno no haber llevado este asunto a la Comisión Informativa de Urbanismo. El alcalde ha rechazado tajantemente estas acusaciones, enmarcándolas en una estrategia política recurrente de la formación opositora.
El regidor utilizó una analogía para quitarle hierro a estas acusaciones, sugiriendo que el uso constante de ciertos términos por parte de Ganemos ha diluido su impacto: “Esto es como cuando te acusan de fascista, que la primera vez te preocupa pero a la enésima vez pues ya le dejas de prestar atención y eso es que le pasa a Ganemos y al señor Gómez que siempre piensan que los demás hacen las cosas como ellos mismos las harían”.
Blázquez ha insistido en que el proceso ha sido totalmente transparente y ajustado a la legalidad vigente. “Y aquí lo que ha habido es un proceso ajustado a la legislación con todos los trámites dados”, ha declarado. Además, ha remarcado que el proyecto ha sido debatido ampliamente en la esfera pública, no solo en el Pleno, sino también con los propios vecinos de Colmenar Viejo. “Además no puede acusar ni siquiera de eso porque se ha debatido infinitas veces en el Pleno, incluso fuera de la Orden del Día con los vecinos, se les ha explicado todo el proceso y el procedimiento”, ha sentenciado el alcalde, concluyendo que la acusación de oscurantismo es infundada y una muestra de la incapacidad de la oposición de articular otros argumentos.
La planta de biogás sigue su curso administrativo, respaldada por esta aprobación inicial urbanística que, si supera el periodo de alegaciones y la concurrencia de todos los informes positivos en su fase definitiva, acercará su puesta en marcha en el municipio de Colmenar Viejo.

