El Alcalde de Colmenar Viejo ha inaugurado la remodelada entrada al municipio por la M- 608 (carretera de Miraflores), uno de los principales accesos al casco urbano y la conocida popularmente como ‘ruta del colesterol’.
El Alcalde de Colmenar Viejo, Miguel Ángel Santamaría, acompañado del Concejal de Obras y Servicios, Carlos Blázquez, ha inaugurado la remodelada entrada al municipio por la M-608 (carretera de Miraflores), uno de los principales accesos al casco urbano y conocida popularmente como la ruta del colesterol por ser el paseo habitual de numerosos vecinos (sobre todo personas mayores) para mantenerse en forma y saludables. La actuación, contemplada en el Plan Municipal de Inversiones 2012, ha supuesto una inversión de 235.853 €.
El tramo concreto en el que se ha actuado es el margen derecho de la carretera, en dirección al casco urbano, desde el nudo del puente sobre la M- 607 (junto a la Base militar de San Pedro) hasta la calle de Puente de Tejada
El paso del tiempo había convertido ese recorrido, de aproximadamente 1,2 kilómetros, en un trazado con diversas trochas y caminos que el propio tránsito de personas había creado. Hace varios años, esas trochas y caminos se reconvirtieron en tramos de acera solada de dos metros de anchura, siendo el resto del trazado de zahorra con una anchura superior a las aceras. En la zona más al norte, el camino conservaba su antigua naturaleza terriza.
Por otra parte, el recorrido contaba como único mobiliario urbano con ocho bancos de madera, deteriorados por las inclemencias meteorológicas y el uso. La iluminación era la propia de la carretera así como el cerramiento del paseo ya que éste consistía en una bionda metálica en el lateral de la carretera.
Así, los trabajos han consistido, por una parte, en acondicionar los caminos a partir de la calle de Puente de Manzanares hacia el norte, creando un nuevo firme más adecuado al entorno (de zahorra compactada) y más cómodo para el tránsito. Este nuevo trazado está convenientemente delimitado por un bordillo para evitar el deterioro de sus laterales con el tiempo. Se da prioridad así a su uso como paseo y descanso, el más demandado en la actualidad.
Por otra parte, se ha creado un carril bici que conecta con el ya existente en la propia carretera de Miraflores de la Sierra- Soto del Real. El proyecto también ha incluido la plantación de especies vegetales arbustivas y arbóreas, antes inexistentes. Se han plantado especies de sombra (moreras) en alineación, grupos de pinos piñoneros y madroños, dotándoles con una red de riego por goteo automatizada.
Además, se han instalado nuevos bancos, sustituyendo los anteriores, así como 20 elementos de gimnasia, destinados especialmente a las personas mayores; y se ha cambiado la bionda metálica de la carretera por una barrera de madera, con la misma función de proteger y dar seguridad al paseo pero también con un marcado carácter ornamental.
Por último, se ha mejorado el aspecto general de la zona con franjas de gravilla ornamental volcánica y tramos de encachado de piedra ornamental, en los extremos del recorrido, y con césped artificial en el área más al norte de la actuación.