Robots para mejorar la vida de personas con discapacidad

Robots para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad. La Real Academia de Ingeniería ha organizado una sesión para dar a conocer robots de rehabilitación para personas con algún tipo de discapacidad en la que han participado ingenieros industriales del Centro de Automática y Robótica del CSIC-UPM y del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo. Entre ellos figura Eduardo Rocon de Lima, a quien la Real Academia de Ingeniería ha otorgado recientemente el Premio Jóvenes Investigadores 2013 en la modalidad “López de Peñalver”.

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Robots vestibles como tratamiento alternativo al temblor patológico (Eduardo Rocon, CSIC)
El temblor patológico constituye el desorden neuromotor más extendido (afecta a un 1–2 % de la población, 6% de las personas con más de 60 años); además su incidencia está aumentando con el envejecimiento de la sociedad. Aunque el temblor no tiene impacto sobre la esperanza de vida, sí que causa discapacidad funcional y es motivo de exclusión social. De hecho en torno al 65 % de la gente que sufre temblor de miembro superior presenta grandes dificultades para realizar sus actividades cotidianas.
Estas deficiencias tienen un impacto importante en la vida del paciente y acarrean costos considerables para el sistema de salud y servicio social. Actualmente este tipo de temblores se trata mediante medicación o estimulación cerebral profunda, pero un 25 por 100 de los pacientes no responde a ninguna de las terapias, por lo que este sistema proporciona una alternativa para un gran número de enfermos.
El sistema ideado por Rocon y sus compañeros consiste en un conjunto de sensores que son capaces de medir toda la cadena de generación de movimiento, desde el origen de la orden en el cerebro hasta su ejecución y, a través de esta información, generar las acciones para suprimir el temblor del paciente. Esta charla se centrará en contar los avances de la ingeniería en la definición de un tratamiento alternativo para el temblor patológico.

Exoesqueletos de rehabilitación del miembro inferior (Juan Camilo Moreno, CSIC)

El ictus o accidente cerebrovascular es una de las primeras causas de mortalidad en el mundo occidental. En España es la segunda causa de muerte y la primera en mujeres. Además, supone la primera causa de discapacidad y genera un gasto muy elevado para los servicios sanitarios y sociales, lo que la convierte en una de las enfermedades con mayor impacto social. Algo parecido sucede con la lesión medular, que supone también un problema de salud pública de gran magnitud, ya que incapacita a los afectados e impide que puedan valerse por sí mismos debido a la inmovilidad que afecta a todo su cuerpo o a gran parte de él. Estas patologías que afectan la movilidad han estado ligadas a pronósticos insuficientes que dificultan la recuperación.
Los exoesqueletos robóticos pueden ofrecer una mayor precisión de la que ofrecen las terapias convencionales, de modo que los profesionales sanitarios puedan monitorizar el funcionamiento del sistema nervioso del paciente afectado construyendo un modelo personalizado de la terapia que utiliza nuevas métricas de evaluación como la función muscular, cerebral o el nivel de participación activa del paciente.
Se trata de un enfoque integrado en el que se incorporan dispositivos de asistencia robótica e interfaces con el sistema nervioso para investigar la eficiencia de nuevos paradigmas rehabilitadores basados en la neuroplasticidad. En definitiva, estos sistemas robóticos tienen el potencial de ayudar a los pacientes con problemas de movilidad a recuperar las capacidades perdidas con el fin último de dotarles de una mayor independencia en el desempeño de sus actividades diarias para mejorar su calidad de vida.
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 Robots híbridos de Asistencia a la marcha (Antonio del Ama, Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo)

Como consecuencia de una lesión en la médula espinal, la conexión descendente para la transmisión de las señales del sistema nervioso central a los músculos resulta perdida o disminuida. Debido a las consecuencias funcionales y a la característica fundamentalmente crónica de la patología, el impacto en el individuo y en la sociedad es considerable. Se estima que la incidencia de la lesión medular en España es de entre 12 y 13 casos nuevos, mientras que su prevalencia se establece en la horquilla de 350 a 380 casos por millón de habitantes. Los costes asociados a la lesión medular no se limitan únicamente al periodo de hospitalización, si bien es en este periodo en el que se concentra el mayor impacto económico, alrededor de 100.000 €. Los avances en medicina, tecnología y políticas sociales han resultado en un incremento de la esperanza de vida de las personas con lesión medular. Actualmente la esperanza de vida promedio de personas con lesión medular adquirida entre los 25 y 34 años puede superar los 40 años, dependiendo del tipo de lesión medular.
El logro de la máxima independencia funcional es uno de los principales objetivos para las personas con lesión medular. Existen actualmente varias tecnologías para la rehabilitación de esta función motora. El uso de neuroprótesis motoras basadas en la estimulación eléctrica de los músculos del paciente pueden ser aplicada para inducir la restauración de la función motora. Sin embargo, esta tecnología se ve limitada por la aparición de fatiga muscular y la dificultad en el control del movimiento de las articulaciones. Por otra parte, y como consecuencia en el avance de las tecnologías robóticas, en los últimos tiempos se está asistiendo a una introducción de robots en el ámbito de la rehabilitación de patologías neurológicas.
En este sentido, la estimulación eléctrica de las neuroprótesis motoras se puede gestionar y aplicar de manera más eficiente mediante la combinación con exoesqueletos robóticos que compensen la generación limitada de fuerza de los músculos estimulados, y proporcionen soporte adicional para el cuerpo. Dicha terapia de marcha ambulatoria puede ser probablemente más eficaz para la recuperación de las funciones de la médula espinal en lesiones incompletas que las terapias convencionales, robóticas o neuroprotésicas.
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Angel Sánchez Carbonell
Angel Sánchez Carbonell
Ángel Sánchez Carbonell - Director de Crónica Norte. Desde hace 34 años dedicado profesionalmente a la información y entretenimiento (TVE, Onda Cero, Tele Cinco, COPE...) Pero ante todo: un enamorado de la geografía de la península Ibérica. Montañero y aficionado a la gastronomía y la enología. Cuando la vida me lo permite señalizo caminos naturales como Técnico de Senderos de la Escuela Española de Alta Montaña. (EEAM) Pero sobre todo me pierdo por ellos...

1 COMENTARIO

  1. Excelente, mi hija nació con espina bífida, no tiene sensibilidad en los miembros superiores y me gustaría conocer con más detalle de esto, y su precio.
    Agradecida

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