Las personas que trabajan por la noche tienen mayor riesgo de engordar, según un estudio dirigido por la Universidad de Colorado en Boulder, Estados Unidos. Dormir durante el día provoca que quemen menos energía durante un periodo de 24 horas.
La Universidad de Colorado en Boulder, Estados Unidos, ha realizado un estudio sobre el trabajo en horas nocturnas. Los resultados han desvelado que las personas que realizan alguna actividad profesional durante la noche, no queman tanta energía como si trabajaran por el día.
Los investigadores han sabido que las personas que trabajan y, por lo tanto comen, durante la noche cuando sus cuerpos están preparados biológicamente para dormir, son propensos a subir de peso. Hasta ahora, las razones de esta situación no estaban claras, pero este estudio, a través del análisis a 14 adultos sanos, ha desarrollado esta teoría.
Los voluntarios pasaron seis días en el Centro de Investigación Clínica y Traslacional del Hospital de la Universidad de Colorado. Durante los dos primeros, siguieron un horario normal de dormir por la noche y permanecer despiertos durante el día. Posteriormete, pasaron a un horario por turnos durante tres días, cambiando sus rutinas, pero siempre cumpliendo las 8 horas reglamentarias de sueño.
El reloj circadiano de las personas
Cuando las personas estuvieron en un horario de trabajo por turnos, su gasto diario de energía se redujo y, como consecuencia, si no se sigue una dieta, el peso aumenta. Así, los investigadores descubrieron que la energía diaria total utilizada por los participantes disminuyó cuando estuvieron en un horario nocturno.
Es posible, que esta situación se deba a la falta de correspondencia entre las actividades de la persona y su reloj circadiano. Es decir, los seres humanos han evolucionado para estar despiertos, y por lo tanto, comer cuando hay luz en el exterior, y dormir cuando hay oscuridad. Por ello, el reloj circadiano se establece por la exposición a la luz solar.