El pasado mes de abril el Ayuntamiento abrió un expediente sancionador a la propietaria de la finca Aguas Claras por no disponer de autorización municipal para la cría de perros, denegada por la Consejería de Medio Ambiente por incumplimiento de los requisitos obligatorios para los centros de animales de compañía.
La Junta de Gobierno Local ha aprobado la resolución de dicho expediente, por el que se sancionará con una multa de 3.000 euros a la propietaria de los animales que se identificaron en la investigación realizada por el veterinario municipal, un agente de la unidad de Medio Ambiente de la Policía Local y los agentes del PACPROMA en esas fechas, por ser titular de las solicitudes no concedidas para la inscripción del Centro de Animales de Compañía.
Cierre del centro y la suspensión de su funcionamiento
Por otra parte, el Ayuntamiento, como medida provisional, procederá al cierre del centro y la suspensión de su funcionamiento hasta que cuente con las preceptivas autorizaciones y registros. Para ello dispone de dos meses para que los animales sean trasladados por su propietaria a un centro de animales de compañía autorizado, informando al Servicio Municipal de Vigilancia y Control de Animales de Compañía de su destino.
Desde el Ayuntamiento se han llevado a cabo las investigaciones y actuaciones pertinentes para que se cumplan todas las medidas legales y que los animales se encuentren en las mejores condiciones
