La Ley de una nueva Agencia de Ciberseguridad de la Comunidad de Madrid coordinará a las administraciones públicas y servirá de apoyo a las que carecen de capacidad suficiente para aplicar medidas ante ciberataques
La Agencia de Ciberseguridad propondrá e impulsará el uso de soluciones de prevención, detección y respuesta ante las amenazas en redes y fomentará el emprendimiento del ecosistema empresarial del sector. El texto de la futura Ley se remite ahora a la Asamblea de Madrid para su tramitación parlamentaria y con la previsión de que entre en vigor a comienzos de 2024 tras recibir el respaldo legislativo.
Agencia de Ciberseguridad
La Agencia será clave para aquellas entidades municipales de menos de 20.000 habitantes que no disponen de estrategias ni medios para proteger sus redes y sistemas, desplegando las medidas a seguir. Además, facilitará la conexión con proveedores privados y con aquellos que se relacionen con los servicios públicos a través de medios electrónicos, y actuará como órgano de colaboración con el Centro Criptológico Nacional (CCN).
Sus funciones y competencias le permitirán trabajar con cualquier entidad pública y privada autonómica en coordinación con el CCN para la puesta en marcha de acciones y toma de decisiones comunes ante cualquier eventualidad, ofreciendo su ayuda y asesoramiento. Tras la evaluación de la extensión del suceso, podrá alertar a otras instituciones que puedan verse afectadas para prevenir un mayor alcance.
Ayudas a empresas para evitar ciberataques

Este organismo asesorará y colaborará con pequeñas y medianas empresas de la región que no cuenten con las capacidades suficientes para cumplir con su seguridad frente a los ciberataques. Igualmente, desarrollará medidas de difusión, formación y concienciación para impulsar la cultura en este ámbito y ofrecer a los ciudadanos el marco de confianza necesario en su relación con los medios electrónicos.
La Agencia, que estará adscrita a la Consejería de Digitalización, contará con cerca de 15 trabajadores, en su mayoría con perfiles tecnológicos. Así, habrá un consejero delegado y diferentes puestos de consultores en esta materia, ingenieros de desarrollo y de sistemas y puestos administrativos y de gestión. Se dividirán en dos subdirecciones: una de servicios corporativos y otra operativa.