Un estudio publicado por la revista Sleep muestra como los adultos que se acuestan tarde y duermen poco tienen una mayor probabilidad de engordar debido al consumo de calorías en las horas nocturnas.
El estudio refleja que disfrutar de pocas horas de sueño y descanso además de provocar sensación de cansancio al día siguiente, nuestro organismo tiene más probabilidades de engordar debido a la ingesta de calorías durante las horas nocturnas.
El estudio analizó a 225 adultos sanos entre 22 y 50 años, que pasaron sólo cuatro horas en la cama, entre las cuatro de la madrugada y las ocho de la mañana, durante cinco noches consecutivas y adultos que dormían diez horas cada noche, de diez de la noche a ocho de la mañana. Los resultados mostraron que los sujetos que dormían menos habían engordado más.
Durante la noche se produjo un aumento global de la ingesta de calorías que se debió al aumento del número de comidas adicionales durante la noche. Por otra parte, la proporción de calorías consumidas de grasa fue mayor durante las horas nocturnas que en otros momentos del día.
«Aunque los estudios epidemiológicos anteriores han sugerido una asociación entre la duración del sueño y la ganancia/obesidad peso, nos sorprendió observar el aumento de peso significativo en un estudio en laboratorio», dijo el autor principal Andrea Spaeth, del Departamento de Psicología de la Universidad de Pennsylvania (Estados Unidos).
Durante el estudio, los pacientes disfrutaron de las comidas habituales a las horas precisas pero siempre tenían comida disponible en la cocina de laboratorio para los participantes que quisieran comer en otros momentos del día. Además, el estudio encontró que los hombres durante la restricción del sueño ganaron más peso que las mujeres y los afroamericanos subieron más de peso que los caucásicos.
