La Comunidad de Madrid impulsa una innovadora investigación que busca mejorar la calidad de vida de los pacientes con Parkinson a través del tenis de mesa. En este estudio pionero en España, 24 pacientes del Hospital Universitario de La Princesa participarán en sesiones de entrenamiento adaptadas que se extenderán durante seis meses, evaluando si este deporte contribuye a su bienestar físico y cognitivo.
En España, más de 150,000 personas y sus familias conviven con el Parkinson, una enfermedad neurodegenerativa que deteriora progresivamente las capacidades motoras y cognitivas, y afecta a millones de personas en todo el mundo. Sin cura disponible hasta el momento, la comunidad médica y científica se ha volcado en terapias complementarias que no solo ofrecen mejoras en el desempeño diario de los afectados, sino también en su calidad de vida. Bajo esta premisa, el Hospital de La Princesa de la Comunidad de Madrid ha puesto en marcha el proyecto Pimpón Park, el primer estudio nacional que evalúa los beneficios del tenis de mesa en personas con Parkinson.
¿Cómo ayudará el tenis de mesa a los pacientes?
El tenis de mesa es un deporte que combina actividad física con ejercicios de concentración, coordinación y reflejos. Durante cada partida, los jugadores trabajan su percepción visual y control motor, además de estimular funciones mentales que, en el caso de personas con Parkinson, son esenciales para mantener su autonomía. La hipótesis de Pimpón Park es que la práctica regular de este deporte podría mejorar los síntomas motores, cognitivos y no motores de los participantes.
“Los estudios previos sobre los beneficios del ejercicio en pacientes con Parkinson son alentadores, pero esta es la primera vez que exploramos el impacto específico del tenis de mesa en este tipo de patologías,” señala uno de los especialistas de la Unidad de Trastornos del Movimiento del Hospital de La Princesa.
Un estudio exhaustivo con sesiones adaptadas
El proyecto Pimpón Park durará seis meses y contará con 24 pacientes seleccionados bajo estrictos criterios médicos, todos en fases iniciales de la enfermedad. Estas personas realizarán dos sesiones de entrenamiento semanal, con una duración total de dos horas, donde serán guiadas por un equipo médico y un entrenador especializado en tenis de mesa. Las sesiones están cuidadosamente adaptadas a la condición física de cada paciente y están pensadas para facilitar su progresión en el deporte sin poner en riesgo su salud.
A lo largo del estudio, se evaluará si el entrenamiento ayuda a mejorar su situación motora, no motora y cognitiva. Cada avance se medirá de acuerdo a indicadores de salud específicos, permitiendo así que los investigadores obtengan datos detallados sobre el impacto del ejercicio en diferentes áreas de la enfermedad.
Un equipo multidisciplinar y una colaboración clave
El Hospital de La Princesa ha contado con la colaboración de la Asociación Española de Jugadores Veteranos de Tenis de Mesa, quienes han donado las mesas de juego necesarias para las sesiones. Asimismo, el proyecto cuenta con el apoyo de Javier Pérez de Albéniz, un paciente con Parkinson que es también subcampeón de tenis de mesa y un apasionado defensor de las terapias alternativas. Su implicación en el estudio servirá de inspiración para los demás pacientes, quienes ven en él un ejemplo de cómo el deporte puede transformar su vida diaria y devolverles el entusiasmo.
El proyecto también ha recibido la aprobación del Comité Ético de Investigación Clínica del Hospital de La Princesa, lo cual garantiza que los métodos y las prácticas se realizan bajo los más altos estándares de seguridad y ética en investigación.
¿Por qué el Hospital de La Princesa?
El Hospital de La Princesa se ha consolidado como un referente nacional en el tratamiento del Parkinson, gracias a su Unidad de Trastornos del Movimiento, que lleva desde 2006 siendo el Centro de Referencia Nacional para la Cirugía Funcional del Parkinson. Este hospital cuenta con una amplia trayectoria en intervenciones de Estimulación Cerebral Profunda, con alrededor de 30 intervenciones anuales que buscan mitigar los efectos de la enfermedad.
Además de su experiencia quirúrgica, el hospital participa en múltiples ensayos clínicos y colabora en proyectos europeos, lo que le ha permitido desarrollar una visión integral sobre el Parkinson y los métodos más efectivos para tratarlo.
Resultados y perspectivas futuras
Se espera que los primeros resultados del proyecto Pimpón Park se presenten en los próximos años en foros científicos tanto nacionales como internacionales. Estos hallazgos podrían abrir la puerta a nuevas opciones de terapia para el Parkinson, un área en la que las terapias físicas están ganando cada vez más protagonismo debido a su enfoque integral y los beneficios clínicos que ya se han demostrado en la práctica diaria.
La pregunta que queda por resolver es: ¿será el tenis de mesa una actividad recomendada para todos los pacientes con Parkinson? Si bien los expertos son cautelosos, la idea de incluir este deporte como parte de las terapias para mejorar la calidad de vida de los pacientes es una perspectiva esperanzadora. En cualquier caso, esta iniciativa marca un hito en la búsqueda de nuevas formas de apoyo para las personas que viven con Parkinson.
La importancia del ejercicio en el tratamiento del Parkinson
A medida que el Parkinson avanza, el ejercicio físico se presenta como una herramienta fundamental para los pacientes, ayudándoles a mantener su movilidad y autonomía. De hecho, estudios recientes han demostrado que los programas de ejercicio específicos pueden reducir la rigidez, mejorar el equilibrio y fortalecer la musculatura, factores esenciales para la vida cotidiana de una persona con Parkinson.
Al explorar alternativas no farmacológicas, el equipo médico de La Princesa ofrece una perspectiva de esperanza y abre nuevas posibilidades que pueden mejorar sustancialmente la calidad de vida de los pacientes. Con Pimpón Park, no solo se promueve el deporte, sino también la salud mental y emocional de quienes enfrentan este desafío día tras día.