La Comunidad de Madrid ha dado el primer paso oficial para dotar al desarrollo de Madrid Nuevo Norte de la infraestructura de transporte necesaria para su funcionamiento. El Gobierno regional ha aprobado el contrato para diseñar las nuevas cocheras de Metro, una pieza clave que permitirá el mantenimiento y estacionamiento de los trenes en la futura ampliación de la Línea 1. Esta inversión inicial de más de 800.000 euros marca el inicio de un proyecto que transformará la movilidad en el norte de la capital.
El crecimiento de Madrid hacia el norte requiere de una planificación técnica exhaustiva antes de que las máquinas empiecen a trabajar sobre el terreno. Por ello, el Consejo de Gobierno ha autorizado la licitación para redactar el proyecto de edificación de estas instalaciones. Con un presupuesto exacto de 803.789 euros, este contrato se convierte en el primer vínculo administrativo concreto para esta actuación dentro del nuevo desarrollo urbanístico.
El objetivo principal de esta iniciativa es dar soporte a la prolongación de la Línea 1, asegurando que los trenes tengan un lugar cercano para su almacenamiento y depósito. No se trata solo de un edificio operativo, sino de la garantía de que el servicio de Metro sea fluido y eficiente para los más de 175.000 ciudadanos que, según las previsiones, vivirán en este nuevo barrio.
Las características de las futuras instalaciones
Las nuevas cocheras no serán visibles en su totalidad, ya que gran parte de su estructura se diseñará para estar integrada en el entorno. La planificación contempla una superficie aproximada de 15.000 metros cuadrados, a los que se suman otros 26.000 metros cuadrados bajo rasante. Esta zona subterránea es especialmente relevante, pues albergará un depósito con entre seis y ocho vías sencillas para los convoyes.
A pesar de su importancia para el día a día, estas instalaciones se centrarán en el estacionamiento estratégico de los trenes para facilitar su salida a las vías en hora punta. Las tareas de mantenimiento más complejas y los ciclos de revisión técnica se seguirán realizando en los talleres que Metro ya tiene operativos en Valdecarros y Hortaleza, optimizando así los recursos que ya posee la red.

Tres nuevas estaciones para la red de Metro
La ampliación de la Línea 1 es uno de los pilares del transporte en Madrid Nuevo Norte. Según los planes detallados por el Ejecutivo regional, la extensión comenzará en la actual estación de Chamartín, un punto clave donde los viajeros podrán conectar también con la Línea 10. Desde allí, el suburbano se adentrará en el nuevo desarrollo con un recorrido que incluye tres nuevas paradas.
Aunque los nombres son todavía provisionales, las estaciones se han identificado como Centro de Negocios, Fuencarral Sur y Fuencarral Norte. Esta disposición permitirá que el transporte público sea la columna vertebral de un área que pretende reducir la dependencia del vehículo privado. La construcción de las cocheras es, precisamente, lo que permitirá que estos trenes operen con la frecuencia y seguridad necesarias.
El impacto en Madrid Nuevo Norte
Este proyecto de infraestructuras se integra en una operación urbanística de dimensiones colosales. Madrid Nuevo Norte abarca una extensión de 3,29 millones de metros cuadrados, donde está prevista la construcción de 10.500 viviendas y la creación de un nuevo distrito financiero que atraerá a miles de trabajadores a diario. Además de las oficinas y comercios, la zona contará con un gran parque central de 13 hectáreas.
Para que un motor económico y residencial de este calibre funcione, la red de transporte debe estar lista a tiempo. La Dirección General de Infraestructuras está trabajando para que la construcción de las cocheras y la ampliación de la línea se ajusten a la disponibilidad del suelo y a los plazos de urbanización del terreno.
Una red de mantenimiento en expansión
Con la llegada de estas nuevas instalaciones, el Metro de Madrid reforzará su capacidad operativa. Actualmente, el suburbano cuenta con 14 espacios de almacenamiento y mantenimiento repartidos estratégicamente por toda la región. Estos recintos ocupan en total 1,4 millones de metros cuadrados, permitiendo que los trenes estén siempre cerca de los puntos de inicio de cada línea.
La incorporación de las cocheras de Madrid Nuevo Norte supone una mejora cualitativa para la zona norte, permitiendo que la Línea 1 tenga un pulmón logístico propio en su extremo septentrional. Esto evita que los trenes tengan que recorrer largas distancias en vacío desde otros depósitos, lo que se traduce en un ahorro de energía y una mayor rapidez de respuesta ante cualquier incidencia en el servicio.











