Condenado un pastor a cuatro meses de prisión por matar con cebos envenenados a los perros de otro ganadero.
El juzgado de lo penal número dos de Ciudad Real ha condenado a un pastor por envenenar a los perros de su inquilino. El acusado ha sido condenado a cuatro meses de prisión y a la inhabilitación del ejercicio de la caza durante un año por la comisión de un delito contra la fauna y al pago de una multa de 900€ por un delito de daños. Con esta ya son cinco las sentencias condenatorias por el uso ilegal de veneno en la que SEO/BirdLife ha ejercido la acusación particular en el marco del proyecto Life+ VENENO.
Los hechos tuvieron lugar en agosto de 2010, en el término municipal de Calzada de Calatrava, provincia de Ciudad Real. El pastor acusado tenía arrendada la caza y los pastos de una finca a otro ganadero que poseía dos perros, un mastín y otro de raza carea cuyo valor tasado pericialmente en más de 400 euros.
El acusado colocó en distintas zonas de la finca arrendada cebos de carne impregnada con dos sustancias altamente tóxicas. Al ingerirlos, los perros murieron. La Guardia Civil encontró en el cortijo del acusado un tarro de cristal y un saco de papel con el veneno utilizado, así como porciones de carne y huesos rociados de dicha sustancia.
Zona protegida y de animales en peligro de extinción
El uso de veneno en este caso podría haber tenido consecuencias graves para la fauna silvestre, ya que el lugar donde se hallaron los cebos envenenados se encuentra en terrenos considerados como zona de importancia para el lince ibérico, especie catalogada en peligro de extinción. Es además una zona de dispersión y de importancia del águila imperial y del buitre negro, especies protegidas. El uso de veneno ha puesto en serio peligro a estas especies que podrían haber muerto envenenados como consecuencia de la ingestión de los cebos ó de animales previamente envenenados.