Las cuentas están hechas. Según ha informado la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) la Administración Tributaria ingresó, durante el año 2008, un total de 9.266 millones de euros en impuestos derivados del tabaco, sin embargo, para cubrir los gastos sanitarios de sólo cinco enfermedades -EPOC, asma, cáncer de pulmón, enfermedad cerebrovascular y enfermedad coronaria-, el Estado pagó 6.870 milones de euros. En palabras de los expertos, el importe total de los gastos derivados por este hábito supera los 14.700 millones de euros, lo que supone un coste anual de 5.434 millones de euros.
Tal y como indicó el presidente de SEPAR, Juan Ruiz, «además de los beneficios en cuanto a ahorro de costes a la sanidad pública, la ampliación de la Ley Antitabaco supondría uno de los mayores avances en los últimos años en cuanto a salud pública«. Asimismo, el médico señaló que el tabaquismo debe tratarse como “un problema de salud pública de gran dimensión que cada año se cobra vidas humanas de fumadores activos y pasivos”.
Por su parte, el coodinador del área de tabaquismo de SEPAR, Carlos Jiménez, explicó que la prohibición de fumar en bares y restaurantes, según los estudios económicos, es favorable para el sector de la hostelería. En este sentido y, entre otros ejemplos, desde la citada entidad, han asegurado que, en Irlanda, «el sector hostelero sembró la alarma antes de la aprobación de una Ley Antitabaco que prohibía fumar en lugares cerrados y anticipó pérdidas del 25%«. En cambio, «un estudio realizado en Dublín tras la entrada en vigor de la prohibición de fumar en locales cerrados, demostró que la contratación de personal del sector aumentó un 11%«.
