Llega la Semana Santa, y con ella los viajes, los atascos, las procesiones…Pero también se disfruta de buenas comidas, entre las que destacan los postres típicos de estas fechas como las torrijas o los huevos de Pascua.
Durante los días de Semana Santa no puede faltar en la mesa el dulce típico de estas fechas: las torrijas. ¿Conoces la receta? Los ingredientes para realizar este plato son: pan, leche, canela, azúcar, aceite, ralladura de naranja y de limón.
Preparar las torrijas
Primero se calienta la leche, y le añadimos 6 cucharas soperas de azúcar, una rama de canela y la corteza de un limón o de una naranja. Lo dejamos hervir durante 5 minutos. Mientras, cortamos la barra de pan en rodajas gruesas, concretamente 2 ó 3 centímetros, y las metemos en leche hasta que estén empapadas.
© Jesús Pérez Pacheco
A parte, debemos realizar una mezcla con azúcar y canela para el espolvoreado final.Ten en cuenta que por cada kilo de azúcar tendrás que usar unos 10 gramos de canela. A continuación pasamos las rodajas por huevo batido y las echamos a la sartén vuelta y vuelta con el aceite bien caliente. Una vez fritas, las ponemos sobre un papel absorbente y las espolvoreamos con la canela y el azúcar.
Paseo gastronómico por Madrid
Aunque, si no quieres cocinar también te puedes acercar a los típicos establecimientos madrileños como la Antigua Pastelería del Pozo, famosa por la elaboración artesanal de hojaldres, o El Anciano Rey de los Vinos, una taberna centenaria célebre por sus torrijas, vino dulce y pestiños.
Huevos de Pascua
© Walter A. Aue
Pero no solo las torrijas se han consolidado como el postre por excelencia en Semana Santa, las tradiciones europeas llegan también a nuestro país como es el caso de los huevos de P31ascua.
La tradición es que el domingo de Pascua lleguen las campanas volando desde Roma y dejando caer los huevos de chocolate. Son los padres los que los cuelgan de los árboles y los esconden por el jardín o en rincones de la casa para que los niños los encuentren.
© etringita
Otros postres tradicionales son las monas de Pascua propias de Valencia, Cataluña, Castilla-La Mancha y Murcia, o los pestiños andaluces.