Metro de Madrid comenzará las obras de renovación integral de la línea 4 el próximo 13 de enero, por lo que permanecerá cerrada durante un plazo aproximado de ocho semanas, según fuentes del suburbano.
Con la intención de minimizar las molestias que puedan causar a los viajeros, se pondrá en marcha un servicio sustitutivo gratuito de autobuses entre Pinar de Chamartín y Avenida de América y se reforzarán líneas ya existentes.
Esta obra, que cuenta con un presupuesto de más de 47 millones de euros, tiene como objetivo mejorar la capacidad y la fiabilidad en la explotación de la línea a través de un conjunto de acciones que buscan la renovación y homogenización de la señalización ferroviaria y la electrificación de la línea aérea, con la instalación de un sistema completo de catenaria rígida.

Reducir las incidencias y el gasto en mantenimiento de Metro
Esta estructura permitirá reducir el número de incidencias en la red de Metro y el gasto en mantenimiento. Con estos trabajos se pretende sustituir por completo la catenaria tranviaria por una rígida, una forma de transmisión de la electricidad a los trenes caracterizada por su mayor fiabilidad, disponibilidad y menor necesidad de mantenimiento.
El nuevo sistema está preparado para funcionar tanto a 1.500 voltios como a los 600 actuales, lo que en un futuro permitirá aumentar la capacidad de trenes en la línea y reducir pérdidas de energía.
Los trabajos, que se suman a los que ya se están llevando a cabo para renovar la señalización ferroviaria y que tienen como objetivo disminuir los tiempos de recorrido de los trenes en la línea, mejorarán la capacidad de transporte, la seguridad y la eficiencia en el mantenimiento.
Intervención en los trenes y las estaciones de Metro
Para que toda la renovación de la señalización sea efectiva, es necesario intervenir también en un total de 105 unidades de trenes 3000 y 42 unidades de trenes 2000. Por otro lado, se llevará a cabo la modernización de cuatro estaciones -Esperanza, Prosperidad, Arturo Soria y Alfonso XIII-, que coincidirá con el cierre de Línea 4, aunque se trata de trabajos independientes.

El objetivo es sustituir los revestimientos, instalaciones y tecnología obsoleta de los andenes y sus accesos por otros materiales y equipamientos más actuales y adaptados a las normativas, lo que facilitará las labores de mantenimiento y mejorará la funcionalidad de las instalaciones.
Además, se ampliará la red de drenaje y saneamiento de la estación con nuevos sistemas de impermeabilización, se instalarán nuevas canalizaciones eléctricas y se dotará a estos espacios de nuevo mobiliario. A estas obras, hay que añadir la impermeabilización también de la bóveda de Avenida de América. Las obras en la línea 4 también contemplan la eliminación de las instalaciones con amianto en el túnel y las paradas.