Tres Cantos muestra su territorio en un libro abierto de naturaleza. El Ayuntamiento presenta una guía digital con ocho rutas de senderismo diseñadas para todos los públicos: desde ciclistas hasta familias con niños. La propuesta no solo detalla distancias —entre 5 y 21 kilómetros—, sino que incorpora códigos QR para descargar tracks en Wikiloc, fichas de flora y fauna, e incluso una «caza de tesoros» para los más curiosos.
«Queremos que los tricantinos redescubran su municipio a través de sus encinares, arroyos y cañadas», explica el consistorio. La iniciativa, accesible en web.trescantos.es, combina tecnología y tradición: mientras los senderos siguen huellas centenarias —como las del Camino de Santiago—, los códigos QR permiten geolocalizar puntos de interés con el móvil.
Una guía pensada para disfrutar, aprender y cuidar
Además de ofrecer una propuesta de ocio saludable y sostenible, la guía incluye información sobre el proyecto Arco Verde de la Comunidad de Madrid, cuyo objetivo es conectar los parques regionales mediante corredores naturales. Valdeloshielos y el Monte de Viñuelas, dos puntos clave en el municipio, están incluidos en esta gran red ecológica.
Las rutas no solo invitan a caminar, sino también a observar, descubrir y, sobre todo, valorar el patrimonio natural que nos rodea. Una excusa perfecta para dejar el coche en casa, calzarse unas deportivas y salir a explorar.

Un paseo entre historia y biodiversidad
Una de las rutas más completas y sugerentes es la que une Valdeloshielos con el Puente de la Marmota, un recorrido circular de 21 km. A lo largo del camino, se atraviesan paisajes que combinan valor ecológico e histórico, como el arroyo Tejada o el monte del Pardo. Además, esta zona es uno de los pulmones verdes más importantes del municipio.
Naturaleza en familia: la ruta de Valdeloshielos
Para los que buscan un plan tranquilo o una primera experiencia de senderismo, la ruta de Valdeloshielos es perfecta. Son solo 5 kilómetros por caminos en buen estado, rodeados de naturaleza y con pequeños tesoros por descubrir. Sapos, culebras, abejarucos y varios juegos de observación hacen que sea una opción ideal para ir con niños.
Siguiendo el curso de los arroyos
El corazón de Tres Cantos late junto a sus arroyos. Las rutas que siguen los cauces de Valdecarrizo y Bodonal cruzan tanto las zonas más antiguas como las más modernas del municipio. Estos senderos nos muestran cómo la ciudad convive con su entorno natural. No es raro encontrar especies tan peculiares como el gallipato —un anfibio ibérico que habita en charcas temporales— o al colorido pico picapinos entre los álamos.

Un tramo del Camino de Santiago… sin salir del municipio
Pocos lo saben, pero Tres Cantos forma parte de la tercera etapa del Camino de Santiago de Madrid. Esta ruta, de 11 kilómetros, invita a seguir las tradicionales señales de la concha del peregrino mientras se avanza entre dehesas y paisajes rurales, con el arroyo Tejada como guía. Una oportunidad única para vivir una experiencia diferente sin necesidad de grandes desplazamientos.
El anillo verde: un pulmón urbano al alcance de todos
El recorrido llamado «El anillo verde» es un homenaje al equilibrio entre ciudad y naturaleza. Esta ruta circular de 18 kilómetros bordea el municipio sin salir de él, conectando espacios verdes, parques, áreas deportivas, zonas infantiles y huertos urbanos. Es una forma distinta de entender cómo Tres Cantos ha integrado la sostenibilidad en su diseño urbano.
Parque de los Alcornoques: biodiversidad entre nosotros
Otra parada destacada es la ruta por el Parque de los Alcornoques. Comienza en la casa vivero de ARBA3C y transita por zonas donde la biodiversidad mediterránea ha encontrado refugio. Encinas, enebros, lavandas y especies tan sorprendentes como el águila imperial o la mariposa macaón habitan estos espacios. Es un ejemplo vivo de cómo la conservación de la naturaleza puede formar parte del día a día ciudadano.
Entre canales, cañadas y castillos
Para los más curiosos, la ruta que recorre el Castillo de Viñuelas es una invitación a viajar en el tiempo. Sus 12 kilómetros permiten descubrir senderos históricos usados durante siglos por el agua y el ganado. Este camino conecta con el pasado ganadero de la región y ofrece algunas de las vistas más bonitas del entorno.